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Cádiz

El Caído cumple con su historia en la calle

Alrededor de las nueve y media de la noche llegaba el titular de la cofradía, mientras algunas secciones de penitentes entraban ya con el agua en la calle

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  • El titular del Caído -

Las previsiones meteorológicas no atisbaban nada bueno desde primera hora de la mañana. Con las puertas de la Iglesia Conventual de San Francisco abiertas para las visitas protocolarias de las autoridades y del público antes de la salida, la pregunta era la misma cada cinco minutos: ¿Se sabe si sale?
Miradas al cielo de los hermanos buscando una respuesta que no llegaría hasta la última reunión antes de la hora fijada para comenzar la salida hacia la Santa Iglesia Catedral. Tocaba esperar. Y la espera se hacía larga, tanto en la mañana como en las primeras horas de la tarde con los hermanos ya dentro del claustro de San Francisco.

La Hermandad del Caído nunca en su historia se ha quedado sin salir por la lluvia. Y este año, la historia llamaba a su puerta para seguir escribiéndose en forma de talismán y darse una serie de circunstancias para que la Hermandad de las tres cruces de guía volviera a plantarse en la calle.

Con la decisión tomada, la cofradía comenzó a buscar la calle de San Francisco camino de la Catedral. Sonaban los primeros compases de la marcha ‘Por siempre madre’ tras el paso de Cristo, a cargo de la Agrupación Musical Virgen de la Oliva de Vejer, en homenaje a Loli Ramos, la mujer del hermano mayor, Pedro Reynoso, que tanto hizo por la joven hermandad marianista. El camino hasta Catedral lo realizaron con tranquilidad, hasta que en Cristóbal Colón, la hermandad decidió acelerar el paso para evitar cualquier incidente por las previsiones de agua que les llegaba. 

Ya habiendo entrado el Cristo en la Santa Iglesia Catedral, seguido de María Santísima de los Desamparados, una nube hizo acto de presencia en las calles gaditanas, donde ya se encontraban todas las cofradías de este Martes Santo. En su interior, el hermano mayor intentaba poner orden a los hermanos y empezaban a estudiar los partes meteorológicos para tomar la decisión más adecuada y ver qué hacían ante esta inesperada lluvia. Durante la estación de penitencia, por parte del obispo de la Diócesis de Cádiz y Ceuta, Rafael Zornoza, se tuvo un recuerdo para las víctimas del atentado ocurrido en la mañana de este Martes Santo en el aeropuerto y metro de Bruselas.  Tras esperar media hora en el interior del Templo, la Junta  decidió volver por carrera oficial hasta Valverde, donde tomó el mismo  recorrido que realizara el día anterior El Nazareno del Amor para llegar así hasta  San Francisco.

Exhaustos llegaron los cargadores, puesto que todo el recorrido de vuelta se hecho prácticamente sin parar, y el agua, inesperada, cogió a la cofradía a las puertas de su Templo, pero con suerte, no hubo que lamentar daños de las tallas. Eso sí, algunas secciones de penitentes sí estuvieron en la calle con el agua cayendo.

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