El Área Sanitaria Este de Málaga-Axarquía ha finalizado las obras de reforma y rehabilitación energética del Hospital La Axarquía, ubicado en la localidad malagueña de Vélez-Málaga; una actuación que ha consistido en la reforma y renovación tanto del equipamiento como de las instalaciones.
Esto ha permitido optimizar su rendimiento "consiguiendo un doble resultado en dos vertientes muy importantes como son la reducción del consumo energético y de las emisiones de dióxido de carbono", según ha explicado el delegado territorial de Desarrollo Sostenible, José Antonio Viquez, en el acto de presentación de las obras, al que ha asistido el gerente del Área Sanitaria Este de Málaga-Axarquía, Miguel Moreno.
En este sentido, Víquez ha afirmado que "con estas medidas la Delegación Territorial de Salud y Familias se alinea con los principios de desarrollo sostenible y de la reducción de emisiones de CO2 que se prevé que en los próximos años dé lugar a una reducción del 41% de emisiones, convirtiéndose Andalucía en la pionera a nivel nacional en la reducción de este tipo de emisiones".
Por su parte, el gerente del Área Sanitaria ha dicho estar "muy satisfechos con la importante transformación que en los dos últimos años se ha producido en nuestra área, tanto a nivel estructural en nuestras instalaciones como a nivel organizativo y de gestión hospitalaria. Todo ello en tiempos de pandemia y con la finalidad siempre de ofrecer el mejor servicio clínico y asistencial a pacientes y usuarios".
Las obras, que se han llevado a cabo durante el pasado 2021, han supuesto una inversión de 1.519.627 euros y han contado con una parte de financiación procedente de fondos Feder.
Hasta ahora el Hospital de la Axarquía conservaba gran parte de las instalaciones industriales originales desde su inauguración en julio de 1985, unas instalaciones con más de 35 años de antigüedad y que no habían sido renovadas en ningún momento, presentando un alto grado de obsolescencia que provocaba numerosas averías.
Entre estos aparatos se encontraban varios equipos de climatización que daban servicio a todo el edificio, incluyendo algunas zonas críticas del hospital como son los quirófanos y la UCI, que hacían necesario en muchas ocasiones recurrir al alquiler de equipos de climatización para suplir las deficiencias del centro, especialmente durante los meses de verano.
Las actuaciones, que han cambiado de forma radical el paisaje de los tejados y cubiertas del hospital, han permitido dotas al centro de dos enfriadoras de 1.200 Kw/Frg, siete climatizadoras, bombas de secundario con caudal variable, siete lámparas led para quirófanos, el aislamiento de tuberías y climas, y contadores de energía, además de placas de energía fotovoltaica, un revestimiento de cubiertas con pintura reflectante para reducir la temperatura, y un software de gestión energética.
Este software de gestión energética, conocido como 'building management system (BMS)', es un sistema informático que controla y automatiza los elementos mecánicos, eléctricos y tecnológicos del inmueble, en este caso los correspondientes a la climatización del edificio convirtiéndolo en un edificio inteligente.
El control y monitorización constante de las instalaciones electromecánicas del centro ha optimizado su rendimiento, permitiendo una reducción de más del 30% del consumo energético dedicado a la producción frigorífica, así como la reducción en más de 3% de los consumos energéticos internos, y una disminución de 141 toneladas al año en las emisiones de dióxido de carbono.