El Villarreal, que se enfrenta este miércoles al Juventus en Turín en el partido de vuelta de los octavos de final de la Liga de Campeones
El Villarreal, que se enfrenta este miércoles al Juventus en Turín en el partido de vuelta de los octavos de final de la Liga de Campeones, necesita, tras empatar 1-1 en la ida, un triunfo en tierras italianas para acceder a la siguiente fase, un resultado que fue capaz de cosechar en dos de sus tres últimas visitas.
El conjunto villarrealense se impuso en diciembre al Atalanta (2-3) en el último partido de la primera fase de la presente edición de la competición, después de haber conseguido un triunfo ante el Roma (0-1) en los dieciseisavos de final de la Liga de Europa en la temporada 2016-2017.
La diferencia es que mientras ante el conjunto de Bérgamo el resultado le sirvió para acceder a octavos, al clasificarse segundo de grupo por detrás del Manchester United, el del Roma fue un triunfo testimonial, ya que su rival habían goleado en la ida por 0-4.
En la temporada 2015-2016 también sacó un resultado positivo en su paso por Italia, ya que empató ante el Nápoles (1-1) en octavos de final, lo que le permitió eliminar al conjunto napolitano al que se había impuesto en La Cerámica en la ida (1-0)
Sin embargo estos tres resultados son la excepción a una racha previa en la que acumula cinco derrotas y tres empates en ocho compromisos.
El Villarreal cayó ante rivales como el Torino, Roma, Nápoles, Inter de Milán y Lazio e igualó contra Brescia, Lazio y Nápoles.