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El jardín de Bomarzo

El efecto Marlaska

Las encuestas insinúan estos días una victoria amplia de Pedro Sánchez, que se alimenta del desangre de un Podemos a la deriva

Publicado: 15/03/2019 ·
12:18
· Actualizado: 15/03/2019 · 12:18
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Bomarzo

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Todos están invitados a visitar el jardín de Bomarzo. Ningún lugar mejor para saber lo que se cuece en la política andaluza

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La elección de parlamentarios para la Cámara de los Comunes en Inglaterra se produce mediante votación en cada uno de los distritos, que elige a un miembro usando el sistema electoral llamado escrutinio uninominal mayoritario hasta conformar un gobierno formado por 650 representantes. Se puede considerar que este sistema fomenta el bipartidismo porque imposibilita que formaciones minoritarias logren representación, pero también produce que los elegidos se deban realmente, y sobre todo, a quienes en sus distritos les votaron y es por esto que muchas veces vemos que la disciplina de voto no es de obediencia férrea al partido. Hay, obviamente, orden político pero sin perder de vista el interés de aquellos votantes que en los respectivos distritos les otorgaron el sillón que ocupan porque, por encima de todo, a ellos se deben.

Marlaska. Las encuestas insinúan estos días una victoria amplia de Pedro Sánchez, que se alimenta del desangre de un Podemos a la deriva desde que el matrimonio Iglesias-Montero situara su nido en el casoplón de 600.000 euros de Guadarrama y eso su electorado no lo va a olvidar. Sánchez quiere, y es legítimo porque quien se presenta es él, un elenco de parlamentarios afines y de su absoluta confianza y más entre aquellos que provengan de Andalucía, donde la ex presidente Díaz continúa al acecho esperando una nueva oportunidad para situarse al ataque. Pese a que en las autonómicas Madrid no interfirió en las listas de Susana Díaz para que ésta las confeccionara a su antojo, en las generales, bajo el paraguas que todo lo tapa de que las listas las confeccionan las asambleas locales, y eso a estas alturas en el partido todos saben que es así solo a medias, las intenciones de Ferraz se han topado con un susanismo activo proponiendo listas y personas en cada provincia. 

Grande-Marlaska nació en Bilbao el 26 de julio de 1962 y, según él mismo relata, suele pasar la primera semana de enero con su pareja y sus tres perros en un apartamento en Costa Ballena, es de suponer que cuando dice esto resume de este modo el contacto que mantiene con la provincia que, en principio, debe votarle para que la represente. Es legítimo, de hecho no sería el primero. La lista de Susana Díaz proponía al alcalde de San Roque, Juan Carlos Ruiz Boix, al que quizás el ansia por todos conocida de abandonar aquella alcaldía hacia otras latitudes le ha jugado la mala pasada de la precipitación porque retratada ha quedado y no pocos son los que estos días batallan para descabalgarle de la candidatura. Como de uno no va a ir, por aquello de la famosa cremallera, solo podría ir de tres por detrás, probablemente, de Miriam Alconchel, que ha mantenido un enfrentamiento constante esta legislatura con la actual alcaldesa de Jerez, Mamen Sánchez, a quien hace solo unos días presentó como candidata el propio Ávalos -muchas presencias y, también, ausencias...-.

En alguna asamblea local, como la de San Fernando, osaron hasta dividir el voto por grupos metiendo la lista de los susanistas por arriba y la de Ferraz por abajo para que, es de suponer, su militancia no equivocara el voto. La división es extrema y lo es pese a los actuales buenos augurios electorales porque en política la bicefalia nunca ha funcionado y hoy vive incluso en la confección de unas listas que deben, o deberían, formarse para la defensa de la provincia en la cámara alta, una provincia muy necesitada de representantes que la defiendan con mucha energía y no con este espectáculo sin gracia, deprimente, bochornoso en su conjunto porque aquí hay poco más que intereses personales, políticos y desarraigo hacia un territorio que no merece tanto desprecio.

Mientras, en el Partido Popular deshojan la misma flor. También hay dos facciones, en este caso las componen el sector dominante en Madrid con Casado y Teodoro al frente con su representante Pepe Ortiz en la provincia de Cádiz, por un lado, mientras que por el otro se sitúa el considerado sorayismo y que hoy domina la Junta, representado en Cádiz por su actual presidente Antonio Sanz. Hay, por tanto, dos propuestas de listas para las mismas elecciones, una quizás encabezada por el candidato de San Fernando Pepe Loaiza y la otra, quizás, liderada por la ex alcaldesa de Jerez María José García Pelayo y ambos, quizás, empujando desde su zona para lograr la cabeza de cartel. Teniendo en cuenta que muchos ya han obtenido cargos y que la lista del Senado situará al frente a Landaluce y nada hace indicar que el PP logre más de uno, pocos nombres quedan libre para completar la lista al Congreso por Cádiz. 

Salvo que al PP le entre envidia y el efecto Marlaska, ya rodada la dinámica, cunda y ponga por Cádiz alguien llegado del norte, quizás otro de los que pasan una semanita al año retozando por estas orillas -sin descartar la posibilidad de que algún independiente cercano al sector de Casado se coloque al frente y retrase a todos un puesto, colocando a Pelayo de dos y a Loaiza de tres-. Como tampoco hay que perder de vista el hecho de que si los augurios se cumplen el PP va a perder en estas elecciones muchos diputados y, por tanto, no sería de extrañar que el partido intentara salvar el sillón de aquellos más fieles colocándoles encabezando determinadas provincias. De ser así, el sector de Casado en la provincia quedaría feamente retratado, bien es cierto que el otro sector visiblemente alterado. Todo esto, en todo caso, se está dirimiendo estos días en Madrid y en poco se sabrá, cuando Teo y Maroto terminen de hilvanar una lista que, como la otra, debería fundamentarse en lo mejor para los intereses de una provincia de Cádiz a la que vendría genial personas que sepan, entre otras muchas cosas, el origen del viento de levante, procedencia, consecuencias, maneras de afrontarlo.

La provincia de Cádiz tiene 45 municipios desde que San Martín del Tesorillo se constituyera como independiente del de Jimena de la Frontera el 2 de octubre de 2018, hasta entonces eran 44. Con una población de 1.239.435 habitantes, tiene una superficie de 7.436 kilómetros cuadrados -algo más de 200 que todo el País Vasco-. Con la peculiaridad de tener ocho municipios por encima de los 50.000 habitantes, como son Cádiz, Jerez, Sanlúcar, El Puerto, Chiclana, San Fernando, Algeciras y La Línea, cuenta con tres grandes áreas metropolitanas; campiña de Jerez, Bahía de Cádiz y Campo de Gibraltar. El estrecho, el Peñón, frontera con África, desembocadura del Guadalquivir, Doñana al frente, sierra y monte, de aquí partió Aníbal para conquistar Italia. Por todo, cultura en áreas tan especiales como el flamenco o la enología, historia, situación geográfica, clima, extensión, gastronomía, potencial turístico con un litoral único, Cádiz celebra su día este 19 de marzo bajo la sombra del efecto Marlaska.

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