Después de un año de pandemia y un 2021 en el que las ferias del libro se han ido atrasando debido a las restricciones, la 50 Feria del Libro de Málaga contaba con unas expectativas altas por parte de todos los progratonistas y, a un día de que concluya, parece haberse cumplido: con una afluencia media de 175.000 visitantes, ha aumentado sus ventas en un 20 por ciento.
Este es el balance que hace la organización, que ha aplaudido en un comunicado su desarrollo, del 5 al 14 de noviembre, en la plaza de la Marina y la apuesta del artista Fernando Vicente por un certal que invitado a poblar este nuevo emplazamiento.
Además del aumento de casetas, hasta 47, y del incremento de un 33 por ciento del presupuesto, la Feria ha recibido la ayuda del Ayuntamiento de Málaga, Junta de Andalucía, Vicerrectorado de Investigación y Vicerrectorado de Cultura de Universidad de Málaga y Diputación de Málaga. Y ha contado con la colaboración de la Fundación José Manuel Lara y EMT.
El aumento medio de las ventas está en torno al 20 por ciento, lo que da una idea de la satisfacción del gremio librero y editor, que han vendido unos 32.000 ejemplares, con un beneficio neto de unos 340.000 euros.
La Feria del Libro de Málaga 2021 ha reunido nada menos que 425 autores y autoras que han participado en unas 375 acciones, atendiendo a la literatura de altura, las nuevas firmas, los públicos de diferentes generaciones, los fenómenos literarios y la creación de nuevos públicos.
Así, no solamente las casetas de las librerías, también espacios como la Pequeteca o la Sala Isabel Oyarzábal, vecina de la plaza de la Marina, han sido los lugares donde un público intergeneracional y heterogéneo se ha dado cita en las numerosas presentaciones de libros, lecturas, actividades para niños, performances literarias, y por supuesto firmas de libros.
