El
Ayuntamiento, los
hoteleros y los
dueños de bares y restaurantes sevillanos reconocen lo evidente: si la pandemia toca la movilidad, se ataca a la misma médula del turismo. El
delegado de Turismo del Ayuntamiento de Sevilla, Antonio Muñoz, fue el primero en poner palabras al
fortísimo impacto que van a tener en el sector de ocio y turístico las últimas
medidas adoptadas para intentar frenar la pandemia. El confinamiento perimetral de la capital, además del toque de queda,
ha hundido las todavía modestas previsiones de ocupación hotelera para este puente de Todos los Santos.
“
Con los datos que facilita la Asociación de Hoteleros de Sevilla, la ocupación estará en torno a un 10 o 15%, cifras que no conocíamos en Sevilla”, manifestó Muñoz. Datos inéditos no por ocupar los primeros puestos de la tabla, sino por todo lo contrario. “
El puente apunta a cifras antes no conocidas en Sevilla por bajas. Si en 2019, tuvimos récord de turistas y pernoctaciones, ahora hay que mirar hacia abajo, desgraciadamente”, abundó Muñoz tras inaugurar la exposición Tríplex en el Espacio Santa Clara. “Malos tiempos para el turismo”, se lamentó el delegado de Turismo.
Sectores afectados
Ante esta situación, que viene a poner la puntilla a un sector que tan sólo empezaba a atisbar una lenta recuperación, la
Asociación de Hoteles de Sevilla y Provincia reclamó ayer un
plan de rescate o “alguna fórmula de ayudas”. “
Muchos hoteles que habían reabierto tras el estado de alarma se han visto obligados a cerrar y también podrían hacerlo otros muchos establecimientos, que ahora aguantan a pulmón por la clientela, el personal o el posicionamiento, por problemas de tesorería”, afirmó a Europa Press el presidente de la patronal sevillana, Manuel Cornax. En la actualidad, en Sevilla se oferta el 64% del total de las plazas disponibles. Cornax confió en que las medidas sirvan para que los datos de la evolución de la pandemia permitan “pronto” la libertad de movimientos en Andalucía. “No es una decisión que dependa de los políticos, sino de las autoridades sanitarias”, sentenció.
Por parte de los hosteleros,
éstos tacharon de “absolutamente insuficiente” el cierre de bares a las 22.30 horas. “Estamos profundamente decepcionados”, afirmó el vicepresidente de la patronal andaluza (Horeca) y presidente de los hosteleros sevillanos, Antonio Luque, en un comunicado.