La reunión celebrada este viernes en el Ayuntamiento de Sevilla sobre las posibles fórmulas mediante las que recabar fondos para rehabilitar la antigua fábrica de vidrios La Trinidad, enclavada en la avenida de Miraflores y cuya nave central, hornos y chimenea están protegidos como bien de interés cultural (BIC), ha tratado la idea de acometer una "valoración" inicial del estado del recinto y confeccionar una "hoja de ruta" de carácter técnico, sobre cómo restaurar y poner en uso al menos un espacio "mínimo" del conjunto fabril.
Marina Sanz, una de las activistas de la plataforma ciudadana que desde hace años reclama la rehabilitación de este antiguo y emblemático recinto fabril, ha explicado a Europa Press que a este encuentro promovido por el propio colectivo han acudido representantes de todos los grupos políticos con representación en el Consistorio hispalense; PSOE, PP, Ciudadanos, Participa Sevilla e IU-CA.
Durante la reunión, según Marina Sanz, ha sido abordado el motivo por el cual la restauración de este espacio no fue incluida en el proyecto pergeñado por el Ayuntamiento de Sevilla para la primera convocatoria de subvenciones de la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible e Integrado (DUSI), financiada con cargo al programa operativo 2014-2020 del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder). Y es que en dicha convocatoria, Sevilla ha cosechado ayudas por 15 millones de euros para actuaciones en los sectores Macarena y Norte.
Según Marina Sanz, ha quedado de relieve que tal extremo no fue posible por los requisitos "de delimitación territorial" estipulados en la convocatoria para las subvenciones. A partir de ahí, y dado que el Ayuntamiento no podría concurrir a la segunda convocatoria de esta línea de ayudas porque ha cosechado 15 millones de euros de la primera convocatoria, durante el debate habrían sido analizadas tres opciones.
BUSCAR FONDOS
La primera de ellas sería la posibilidad de solicitar a las autoridades europeas una "ampliación" del ámbito de actuación delimitado en el proyecto dotado con 15 millones en la primera convocatoria de la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible e Integrado, al objeto de incluir la fábrica de Vidrios. No obstante, la misma Sanz ha dudado de que tal extremo prospere. La segunda idea sería concurrir a la segunda convocatoria de esta misma línea de ayudas, de la mano de "otra administración local" o mediante la figura de la plataforma ciudadana, "apoyada" por otra administración, una fórmula no exenta de dificultades.
Y por último, y según Sanz, los representantes de los grupos municipales habrían tratado la opción de que el pleno del Ayuntamiento instase al Gobierno municipal socialista a incluir en sus próximos presupuestos partidas económicas para la fábrica de vidrios, al objeto de que el Consistorio actuase sobre el recinto "con fondos propios".
De cualquier modo, y según Sanz, en la reunión habría pesado el "compromiso" de proponer al Gobierno municipal socialista la "contratación de un equipo técnico" que evalúe el "estado" del antiguo recinto fabril y diseñe una "hoja de ruta técnica" que defina las obras y el dinero necesario para comenzar a actuar en una zona inicial o "mínima" del conjunto, con destino a su uso público.
LA FÁBRICA DE VIDRIOS A LO LARGO DE LOS AÑOS
Fue el 4 de septiembre de 2001 cuando la Consejería de Cultura acordó inscribir en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz este antiguo y simbólico conjunto fabril de la avenida de Miraflores, adquirido por la sociedad Edificarte Promoción Inmobiliaria, declarada hace años en concurso de acreedores en el marco de la catástrofe sufrida por el sector inmobiliario y de la construcción.
El recinto es uno de los escasos ejemplos que ha pervivido de la arquitectura de la gran industria y de la primera expansión industrial de Sevilla fuera de su recinto amurallado. La declaración de bien de interés cultural incoada y aprobada en aquellos tiempos, en concreto, protege la nave central, los hornos y la chimenea de la planta como lugar de interés etnológico, aunque la Administración autonómica promueve desde hace años un procedimiento para catalogar también las naves dos y tres y unificar los activos protegidos en una única tipología: la de "lugar de interés industrial". La idea, según la negociación promovida años atrás, era ceder al patrimonio público los espacios protegidos a cuenta de sus restricciones en materia urbanística.
A lo largo de los últimos años, de cualquier forma, la quiebra de Edificarte Promoción Inmobiliaria ha agudizado el abandono y ruina del conjunto fabril, que ha sido objeto de diversas ocupaciones ilegales y episodios de expolio, siendo incluso destruidos unos hornos de temple y recocido, así como unas calderas, unas instalaciones aéreas de transporte de vidrio y un horno de fusión, en una actuación que fue incluso elevada a la Justicia.
El pasado mes de junio de 2014, la Gerencia de Urbanismo anunciaba que, merced a un acuerdo plenario de marzo de 2011 relativo a la ampliación de la zona protegida, había culminado el diseño de una nueva propuesta de ordenación que replantea "todo el sector". La nueva ordenación queda plasmada en una modificación del vigente plan especial de reforma interior que, en concreto y según la documentación recogida por Europa Press, amplía las restricciones e instrumentos de protección a las naves auxiliares del conjunto, el muro de cerramiento y el patio de operación del recinto.