El vicepresidente de la Junta y consejero de Administración Local y Relaciones Institucionales, Diego Valderas, ha aplaudido este miércoles la decisión del líder de la CUT, Juan Manuel Sánchez Gordillo, de continuar como diputado de IULV-CA en el Parlamento andaluz y renunciar a la Alcaldía de Marinaleda (Sevilla), lo que contribuye a una "renovación" en esta institución municipal que Sánchez Gordillo gobierna desde hace 35 años.
A preguntas de los periodistas, momentos antes de presidir la firma del convenio entre la Mesa del Tercer Sector de Andalucía y la Confederación de Entidades para la Economía Social (Cepes), Valderas ha considerado "bueno" desde el punto de vista "político y generacional" que se vayan "renovando espacios" tanto en los ayuntamientos andaluces como en otras instituciones.
No obstante, cabe recordar que Sánchez Gordillo deja de ser alcalde de Marinaleda pero permanecerá en este ayuntamiento como concejal. Y es que, según ha destacado Valderas, es incompatible según la Ley Electoral de Andalucía ser alcalde y diputado, pero no diputado y concejal. "Sánchez Gordillo ha cumplido", ha apostillado.
Así, tras señalar que él mismo aconsejó al líder de la CUT que permaneciera en el Parlamento, el que fuera coordinador general de IULV-CA ha asegurado que a cualquier ciudadano andaluz le honra representar a la soberanía popular en el Parlamento, "siendo además Sánchez Gordillo una persona significativa que representa unas opiniones determinadas, no solo en el conjunto de IULV-CA, sino dentro del panorama andaluz".
"Parece importante que esas opiniones estén representadas en el debate parlamentario", ha defendido Diego Valderas, quien ha explicado que esta es su posición y que así se la ha transmitido al líder de la CUT, "pero no ayer, --día en el que formalizó su renuncia a la Alcaldía--, sino desde el inicio de la legislatura".
