El presidente de la Federación de Asociaciones de Gitanos de Cataluña (FAGIC), Simón Montero, ha pedido responsabilidades por el asalto y quema de varias casas de gitanos en Estepa (Sevilla), actos que ha calificado de "racismo" y "xenofobia".
Los incidentes a los que se refiere Montero en una carta pública enviada a los medios de comunicación se produjeron el pasado sábado día 4 en una concentración ilegal en Estepa que derivó en el asalto y quema de seis casas de las familias gitanas del clan de "Los Chorizos", a las que los vecinos atribuyen una ola de robos perpetrados en el municipio sevillano.
El presidente de la FAGIC considera que se trata de "una vez más de actos de racismo y xenofobia hacia los gitanos en España".
"Estas agresiones se suman a las que cada vez con más asiduidad suceden en otros puntos de Europa, como Italia, Bulgaria o Francia", recuerda Montero, quien alerta "de los constantes atropellos que sufren los gitanos" y emplaza "a luchar contra la romafobia que, peligrosamente, se extiende por el continente como una lacra sin un claro compromiso de los gobiernos para erradicarla".
"Los poderes públicos no pueden permitir este tipo de actos. Pedimos, por tanto, responsabilidades al ayuntamiento para que detenga a los culpables de esta agresión racista y para que prevenga este tipo de ataques y no vuelvan a suceder jamás", concluye el presidente de los gitanos de Cataluña.
La Guardia Civil detuvo el pasado domingo en Sevilla a tres miembros del clan de "Los Chorizos", al que los vecinos acusan de numerosos robos en la localidad y que fueron sorprendidos por los agentes cuando viajaban en una furgoneta en la que iban diez personas, además de varios objetos robados.
También ha imputado a 14 vecinos de la localidad por el asalto y quema de las viviendas de las familias gitanas.