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Sevilla

El juez archiva el intento de asesinato de un empresario tiroteado

Recibió un tiro en la sien cuando se encontraba en el interior de su coche parado en un semáforo

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Un juzgado ha archivado, por falta de autor conocido, el intento de asesinato de un empresario y aristócrata sevillano, que recibió un tiro en la sien cuando se encontraba en el interior de su coche parado en un semáforo.

Los hechos ocurrieron hacia las 07.30 horas del 5 de abril de 2012, que coincidía con el Jueves Santo, cuando el empresario Jaime M.P. estaba parado con su coche en un semáforo de la calle Virgen de Setefilla, esquina con la avenida de República Argentina, y se encontraba con la ventanilla abierta pues se disponía a encender un cigarrillo.

Sin mediar palabra, un desconocido se le acercó y le disparó un tiro en la cabeza, que le entró por la sien izquierda y le salió por el ojo derecho, aunque no le afectó a zonas vitales del cerebro.

El agredido perdió el conocimiento y cayó con la cabeza sobre el volante, con lo que el claxon comenzó a sonar y alertó a un vecino del barrio que hacía footing en las inmediaciones.

Este hombre llamó a la Policía y a los servicios de emergencia del 061, cuya rápida intervención permitió salvar la vida al empresario, que a continuación permaneció varios días hospitalizado.

Fuentes del caso han informado a Efe de que el juzgado de instrucción 18 ha dictado el archivo de la causa debido a la "falta de colaboración de la víctima" y a que en los meses transcurridos las gestiones de la Brigada de Homicidios de la Policía han resultado infructuosas.

El archivo ha contado con el apoyo de la Fiscalía de Sevilla, única parte personada, ya que el empresario afectado no ejerció acciones penales.

Al tratarse de un Jueves Santo a primera hora de la mañana la calle donde se produjo la agresión estaba completamente desierta y las grabaciones de los bancos y comercios de las inmediaciones no ayudaron a esclarecer el suceso, han añadido las citadas fuentes.

El empresario, que se dedica a negocios informáticos e inmobiliarios, declaró a la Policía que no vio al agresor y que sintió una explosión, por lo que creyó que le había estallado el mechero que estaba a punto de utilizar.

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