La formación política 3R apuesta por la “refundación” del movimiento vecinal de San Fernando al entender que cuando se trata de los intereses generales de los isleños, la dignificación de sus espacios y equipamientos públicos, así como los valores implícitos en la cosa pública, “nada, ni nadie está por encima de ellos”.
Recuerdan que esta formación política ha sido recurrente en cuestionar el papel que juega el movimiento vecinal, dado que el estado “inaceptable” de las barriadas que en algunos casos supone un verdadero “atropello cívico” para la ciudadanía, ha coincidido demasiado tiempo, algo así como 16 años, con los responsables del actual ente vecinal.
“Es más que evidente, que algo se está haciendo mal”. Todo ello sin tener en cuenta, su nivel de “politización”, así como una “anestesia reivindicativa”, sin parangón e impropia de un instrumento de la sociedad civil, para con la demanda,y con la exigencia de las necesidades de los vecinos y de los isleños en su conjunto.
3R le ha solicitado al movimiento vecinal y sin éxito alguno, su intervención para la constitución de cooperativas y promotora social para ejecutar viviendas públicas para la ciudadanía; le ha pedido que vaya al Pleno y explique la situación de las barriadas; que ejecute balance de su Plan de Inversiones de 2016, que a punto de agotarse este año, sigue sin valorar la ejecución de esas 63 medidas que constituiría y que soporta su valor existencial, así como su status subvencional. Pero siguen sin hacerlo.
También les pidió 3R en una carta abierta y personal al presidente de la Federación de AAVV Isla de León, Antonio Romero, que ayudara a los isleño en una fórmula de presión política, mediante la ejecución de una encuesta vecinal, sobre el control público, de las asignaciones económicas a los partidos políticos que como sabemos suponen que 3 millones de euros de los isleños, en el mismo formato que eligió para la playa canina.
Hasta ahora la Federación le ha dado la espalda a 3R como peticionario, aunque en realidad le ha dado la espalda a los isleños, a una iniciativa tan transversal como esta, que cualquier demócrata debe estar de acuerdo.
3R, pide una profunda revisión, renovación y refundación del movimiento vecinal, haciéndolo participe de fórmulas modernas de actuación dentro del tejido asociativo, pero sobre todo de la implementación de elementos que garanticen la despolitización, la falta de clientelismo político, el ejercicio de la demanda y reivindicación de los intereses de los ciudadanos y de ser corresponsable en sus funciones.
“Ya solo restaba muestras de fractura vecinal e interna, como hemos evidenciado, con las acciones conjuntas de las AAVV el Pino y Casería en los últimos días, para solicitar esta refundación”, dice 3R.
.
