Cinco años después de que la avispilla del castaño llegase hasta el Valle del Genal, tras varias sueltas experimentales y con buena parte de los castañares afectados por la plaga, el Ministerio de Agricultura, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente autorizó a finales de 2019 el uso libre y masivo de Torymus sinensis por parte de los productores de castañas, siempre que sea adquirido en empresas españolas registradas. Recordamos que el Torymus sinensis es el agente de control biológico, depredador natural y único método que se ha demostrado efectivo para luchar contra la avispilla.
Una de la media docena de empresas registradas en el país es la Cooperativa de Castañas “Valle del Genal”, que recientemente fue autorizada como comercializadora para la compraventa del insecto. Mateo Rosado, presidente de la cooperativa, ha explicado que en los últimos días han gestionado el reparto de casi 1.000 dosis de Torymus, que han sido adquiridas tanto por parte de varios ayuntamientos de la zona como de los propios agricultores, y que están siendo liberadas durante estos días en los castañares de la comarca. En este sentido, Rosado ha indicado que “la cantidad de Torymus liberada es considerable, aunque tenemos que ser prudentes y esperar a observar los resultados de la suelta porque la avispilla está ya muy extendida por el valle. En base a esos resultados se actuará en próximas temporadas”. Evidentemente, la entrega de las dosis se ha realizado tras la desinfección del material y siguiendo todas las medidas de seguridad para minimizar el riesgo de contagios de coronavirus.
En las 1.000 dosis del depredador de la avispilla se incluyen las 160 que corresponden a la primera remesa de Torymus que ha sido financiada por la Junta de Andalucía, administración que, en principio, tiene previsto adquirir 680 dosis en 2020 para el castañar malagueño, ubicado, en su mayor parte, en el Valle del Genal. En este punto, el presidente de la cooperativa ha pedido a las administraciones supramunicipales que no se olviden del sector de la castaña y que lo apoyen económicamente, si es posible en mayor medida, con el objetivo de adquirir una mayor cantidad de Torymus en los próximos años.
La Sociedad Cooperativa de Segundo Grado “Valle del Genal” está formada por las Cooperativas de Primer Grado de Pujerra y de Jubrique. En total integran el colectivo cerca de 500 agricultores del entorno que suman una superficie de alrededor de 2.500 hectáreas de castañar, más del 60% de la extensión de este cultivo en el Valle del Genal.
Por último, Mateo Rosado ha agradecido la colaboración de los castañeros en la compra de Torymus sinensis y ha recordado que “la plaga de la avispilla es un problema de todos que debemos solucionar entre todos”. La castaña es el medio de vida para muchas familias del entorno, que obtienen la mayor parte de sus ingresos de la producción de este fruto, por lo que la propagación de la plaga más allá de lo que ya lo ha hecho significaría un autentico desastre para el desarrollo socioeconómico de la zona. El sector de la castaña es un pilar fundamental en el Valle del Genal que permite el arraigo de los vecinos en los municipios, frenando así su despoblación.