“Cada vez hablo más moviéndome y menos con la palabra”, dijo la bailaora en conferencia de prensa, mientras que el director de escena del espectáculo, el arquitecto y escenógrafo Juan Ruesga, resaltó la capacidad de asumir riesgos de la bailaora y lo innovación que supone Cuando yo era..., que también podrá verse el miércoles.
En este nuevo espectáculo, Eva Yerbabuena actúa con “un nuevo elemento” original en las coreografías, el barro, de modo que bailará impregnada en lodo, sin que el cuerpo de baile que la acompañará mañana, integrado por Mercedes de Córdoba, Eduardo Guerrero y Fernando Jiménez, interactúen con el fango que habrá sobre el escenario.
“Ahora llego a la conclusión de que, de alguna manera, cuando una tiene el barro en las manos, para darle forma, necesita agua, el agua que es de donde todos venimos y donde nace la vida”, señaló la coreógrafa, reacia a dar demasiados detalles sobre el espectáculo con el que, confesó, pretende no dejar a nadie indiferente.
Juan Ruesga explicó que la parte central de la escena será un taller de alfarero: “Habrá unas manos, una pella de barro sobre un torno girando, que dará vueltas para que la mano moldee una imagen, una imagen que girará y se moverá”, de modo que se concibe como una sucesión de círculos concéntricos que se abren y se cierran.
Eva Yerbabuena, a preguntas de los periodistas, bromeó con la expresión “tirarse al barro”, referida a la hora de asumir riesgos, pero aclaró que en esta ocasión no cree haber asumido más riesgos que en otras coreografías suyas, y que todos sus trabajos los afronta como si fuesen los últimos, y que cuando crea alguno nunca es consciente de esos riesgos.
La bailaora ni siquiera precisó en el programa los palos flamencos que interpretará a lo largo del espectáculo, cuyas partes se dividen con títulos como El taller del alfarero, El reñiero, Carnaval o El interrogatorio.