El Gobierno de Corea del Norte ha prometido este jueves intensificar su programa nuclear ante lo que ha descrito como "hostilidad" de la comunidad internacional, según ha informado la agencia surcoreana de noticias Yonhap.
La reacción de Pyonyang ha llegado dos días después de que la Asamblea General de Naciones Unidas pidiera al Consejo de Seguridad, a través de una resolución no vinculante, que sopese remitir al Tribunal Penal Internacional (TPI) los supuestos crímenes contra la Humanidad perpetrados por el régimen norcoreano.
"Rechazamos completamente la forzada aprobación de esta resolución, liderada por Estados Unidos, con el objetivo de derrocar nuestro sistema socialista centrado en el pueblo", ha dicho el Ministerio de Exteriores a través de un comunicado.
En el mismo, ha recalcado que "estas acciones hostiles por parte de Estados Unidos fuerzan a Corea del Norte a no evitar una nueva prueba nuclear". "Nuestra capacidad de intimidación bélica se intensificará sin límite como preparativo ante una intervención militar y una agresión armada", ha agregado.
"La razón por la que Estados Unidos ha lanzado este ataque sobre los Derechos Humanos (contra Pyongyang) es porque está intentando buscar un pretexto para una intervención militar", ha valorado el Ministerio de Exteriores.
Así, ha argumentado que "la resolución se basa únicamente en un documento lleno de testimonios inventados por desertores norcoreanos, así como de difamaciones contra Pyongyang". "Todas las repercusiones de la adopción de la resolución serán soportadas por su cabecilla y sus marionetas", ha remachado.
El Tercer Comité de la Asamblea General, que se ocupa de los Derechos Humanos, aprobó el martes una resolución que vincula los abusos en Corea del Norte a su Gobierno y, por tanto, recomienda al Consejo de Seguridad que adopte medidas, como la remisión al TPI o sanciones.
Aunque esta resolución aumentará la presión internacional sobre Corea del Norte, es prácticamente simbólica, ya que es improbable que el Consejo de Seguridad --con China, el principal aliado de Pyongyang, como miembro con derecho de veto-- remita este asunto al TPI.
China y Rusia, también con derecho de veto, ya respaldaron la semana pasada la intención de Cuba de introducir una enmienda en el borrador de resolución que pretendía eliminar la petición al Consejo de Seguridad para que enviara el caso al TPI.
El Tercer Comité emitió un informe el pasado mes de febrero en el que detalla las numerosos violaciones de los Derechos Humanos perpetradas en Corea del Norte, que incluyen campos de concentración, torturas y hambrunas.