Qué le ha aportado la experiencia televisiva?
–Entré con el ideal de mostrar qué se come y se cocina en mi tierra, cuáles son nuestros productos, nuestras elaboraciones y llevar a Málaga y a Andalucía por bandera, no es un papel que yo haya querido asumir, sino mi manera de entender la cocina, yo así lo siento y así lo transmito como en mis locales, en mis negocios; cuando voy a alguna escuela de cocina a dar una charla siempre intento transmitir esos valores, que defiendan nuestros productos, nuestro aceite, nuestro vino, nuestra huerta, nuestro puerto, a veces compramos fuera por desconocimiento, si aquí no se produce soja coge un producto japonés y úsalo pero, si tienes aquí el producto y puedes defender al agricultor de tu zona, al panadero de tu pueblo o el de al lado, para que te vas a ir a comprar algo más industrial que te llegue aquí con un conservante y menos calidad; vamos a luchar por lo nuestro.
¿Cómo se vuelve a la normalidad de la vida diaria?
–Soy el mismo cocinero que era antes, la misma persona, pero ahora la gente me pide fotos y antes no, aunque soy una persona conocida dentro del mundillo, del sector de la gastronomía, ahora nos piden que si podemos asistir a hacer algo benéfico al ser una cara reconocida por el programa, y si con eso podemos ayudar a alguien pues lo hacemos con gusto.
Porque usted antes el programa ya tiene esta vocación con la que sigue adelante.
–Llevo 23 años de oficio, si me cambiara un programa de tres meses o muy bien o muy mal me hubiera ido; a mí lo único que me puede cambiar mi oficio es una primitiva, y seguramente no me lo cambiaría sino que me tomaría mi oficio con más tranquilidad. Tengo pasión, empecé con 13 años en la cocina y ahora tengo 36 y muy claro lo que quiero ser; mi hijo tiene ocho meses y ya tiene su primera chaquetilla, la cocina la vivimos con esta pasión en casa, mi hermano es cocinero también.
Tiene usted en marcha la preparación de un nuevo proyecto…
–Estamos en un proyecto muy bonito Coco Bambú que llevo adelante con un socio Rafael Cámara, luchamos por sacar adelante un proyecto que, si Dios quiere, verá la luz a primeros de junio: se trata de un restaurante polivalente con distintos espacios, una zona más informal con mesas altas, una zona de mesas bajas, arriba una zona de coctelería no solo caribeña, con el típico mojito, sino que vamos a tener cócteles de noche, para maridar con comida, es una buena alternativa poder tomarte un trago largo tipo peruano de pisco, con un tartar o un tiradito o con un ceviche, y la verdad es que el local es espectacular con una terraza arriba donde se ven palmeras y el mar, un sitio agradable a la vista, confortable, cálido, que tengo la suerte de haberme rodeado de un buen equipo, ocho en cocinas y fuera otros siete u ocho. Es un proyecto que empezó antes de ir a Top Chef con una pretensión pero hemos dicho ya que estamos aquí porqué no hacemos esto otro o subimos un poquito más y hemos hecho una inversión importante: tiene dos cocinas, una arriba y otra abajo, una de preparación y otra más a la vista, casi capacidad para 250 personas al mismo tiempo y zona de hamacas en la playa que queremos también dar servicio de comida y de bebida.
¿Cómo está la gastronomía malagueña?
–Goza de una oferta amplísima, pero cada vez nos cuesta más conseguir personal, las escuelas hacen un buen trabajo pero desde aquí pido a todos los organismos públicos que tienen que apoyar las escuelas porque al final son nuestra cantera, que sigan dando caña, que sigan apretando, sacando generaciones de buenos cocineros; que sigan los chavales motivados, con una buena formación, para nosotros es básico porque tenemos una demanda de restaurantes que se nutren de ahí, si no apoyamos las escuelas…, porque aparte, la gente se va, quiere visitar otros restaurantes, y al final, si de cada promoción porque no se invierte salen solo dos o tres buenos y se van fuera, llegará un momento que no tendremos para cubrir lo que demanda Málaga, pero en general su oferta gastronómica brutal aunque la Junta debería darle una vueltecita de tuerca a esto, apoyar y ampliar las escuelas, que las hay grandísimas, con grandes profesores… Benahavís, La Cónsula, que todos los años sacan muy buenos chavales, a veces voy como jurado de sus concursos y veo que tiene gente muy buena. n