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Málaga

La parte más mágica de Málaga

El Círculo de Ilusionistas cumple 33 años y lo celebra con su tercera gala familiar el próximo 1 de abril

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  • El Círculo de Ilusionistas cumple 33 años y lo celebra con su tercera gala familiar el próximo 1 de abril
  • Dedicarse a la magia requiere convencimiento en lo que se hace y mucho esfuerzo, muchas horas de ensayo, de estudio y de preparación de los números
  • Tanto los más jóvenes como los más veteranos coinciden en señalar que el combustible se lo dan ver la cara de ilusión del público tras el truco

Al final, casi todo en esta existencia es cuestión de convencimiento. De proponérnoslo y llevarlo a cabo, o de que nos ilusionen con magia. En el primer lado se encuentran aquellos que en Málaga se dedican a hacer magia como afición o como profesión y militan en el Círculo de Ilusionistas de Málaga, una asociación sin ánimo de lucro que cuenta con unos 75 integrantes, creada hace 33 años y que realiza cada semana reuniones destinadas a la puesta en común sobre este arte misterioso y, desde hace tres, una vez al año, una Muestra Mágica Malagueña, que en esta ocasión será el uno de abril y en el Teatro de la Diputación de la calle Ollerías.  Un festival que nace del trabajo conjunto de ellos, porque Ojeda lamenta que no cuentan en el CIM con otro apoyo.

No hay que temer el error porque como dijo René Lavand el público te perdona un error pero no te perdona el aburrimiento

Pero, ¿qué porque hablamos de convencimiento? Porque el presidente del CIM, Manuel Ojeda dejó claro en el espacio ‘Citas con al actualidad’ de Ondaluz TV que “cuando uno está convencido, no se duda, pero llegar al proceso de convencimiento de que en donde uno lleva trabajando meses, porque no es que veo un video o un libro y ya está ya se hace, sino que para llegar a ese estado de convencimiento y confianza son necesarios mínimo dos o tres meses o más”; a ello hay que añadir “mucha práctica, mucha repetición, mucho ensayo y la repetición te da la confianza, una vez que lo haces tuyo tienes un arma potentísima para ilusionar al personal”.

Ojeda es veterano, pero, curiosamente  Iván un joven mago aficionado de solo 17 años, también tiene claro que si te gusta esta actividad, el futuro puede ser el ejercicio profesional. Fernández asegura “me quiero dedicar a la  magia, aunque ahora ahora todavía es una afición”,  pero en un futuro puede  ser su profesión, es lo que le “encantaría”, dedicarse a algo que le gusta, “dedicar el esfuerzo a la magia”, porque si pudiera trabajar de mago, “estaría encantado, claro”. De momento ahora, le echa al menos una hora al día, porque los estudios no le dejan más, aunque asegura que en cualquier momento piensa en magia y en nuevos trucos.

Porque, hay que convencer al público, y dejar al personal descolocado, eso tanto el más veterano como el más joven lo tienen claro. Ojeda lo tiene claro cuando le preguntas que es lo más gratificante de la magia: “Quizás ver la cara de ilusión que se le queda a la gente, en especial si no son ya tan niños, ves que han vuelto a la infancia”, y esa emoción de lo desconocido que deja los ojos como plato, “eso ya solamente es maravilloso”. Y justifica si eres aficionado o profesional, “el esfuerzo que tanto le dedica uno, porque todo lleva un esfuerzo detrás, y hay que convencer a  la gente de que no es  solo saber el truco,o hay mucho detrás, ensayar preparar una presentación y un número”. 
También Iván Fernández apunta que la energía la da el aplauso y la emoción del personal, “la cara de asombro de cómo ha sido es el combustible y es lo que llena por dentro”.

Protagonistas de la gala

Para la tercera Muestra Mágica Malagueña se han elegido a seis ilusionistas malagueños aficionados que son Irene Pintor, Julio Montoro, Puki Flai, David Villalobos, Mr. D., Mago Juan Herrera  Y Ana Norro, y contará con la presentación de Nebek, también iniciado en esto de hacer trucos de magia.
Solo nos queda recomendarles que vaya,  disfrute, pero desengáñense, no se obsesione con la búsqueda del truco, de la cara oculta, es mejor quedarse siempre con lo que vemos  y con la ilusión que nos produce.

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