Cuatro autocares llenos y un quinto patrocinado

 Cuatro autobuses llenos y un quinto, patrocinado por Talleres Félix Moreno, habla bien a las claras de la movilización que ha producido en el xerecismo el llamado partido del ascenso del Xerez CD, el domingo a las 12 horas en el Municipal Virgen de la Setefilla en Lora del Río, ante un equipo local que ya no se juega nada, pero que querrá despedir la temporada con la mayor dignidad posible y se querrá hacer fuerte ante su público, en la despedida de una temporada que no ha sido lo positiva que ellos hubiesen deseado.
Las entradas, al precio único de 5 euros, se seguirán vendiendo en la tienda oficial del Xerez Club Deportivo en horario de 18 a 21 horas este viernes y en horario matinal en la jornada del sábado. Y es que al margen de los autocares serán muchísimos los coches particulares que hagan los ciento cincuenta kilómetros que separan Jerez de Lora del Río.
En Lora no parece que vaya a asistir mucha afición local, por lo que el equipo xerecista se va a encontrar como si jugase en casa, al calor de los aficionados que quieren celebrar a lo grande este ascenso a Tercera División, que vendría a poner colofón de oro a una temporada extraordinaria de los hombres que ha dirigido Vicente Vargas, aunque en los primeros compases de la competición estuvo Carlos Fontana al frente del equipo. Dimitió en la segunda jornada tras el derbi local de la categoría y Vargas asumió nuevamente el timón de una nave que ha ido descaradamente de menos a más durante toda la competición.
Todos los jugadores prácticamente se harán presentes en Lora del Río, aunque la apuesta de Vicenta Vargas podría ser la de mantener el mismo once que ha ganado los dos últimos partidos, con seis goles a favor y cero en contra. De ser así jugarían David Zamora en la puerta; Barragán, Isra, Alberto Orellana y Guerrero en defensa; Agu y Alberto en el doble pivote; Juanito Benítez, David Narváez y José Vega en la media punta y Pedro Carrión como referencia.
Ya en las mismas instalaciones loreñas se conocerán los hombres que estarán en el banquillo al aguardo de saltar al terreno de juego en cualquier instante de este decisivo choque.