El sindicato provincial de enseñanza Ustea denunció ayer las previsiones de la Delegación territorial de Educación de la Junta en Cádiz de abrir una línea de Secundaria en un centro concertado, en este caso en el colegio Nuestra Señora de El Pilar. Una decisión que, como alertan, contrasta con la supresión de dos líneas de Bachillerato del IES Álvar Núñez que repercutirá en beneficio del IES Sofía, centro que ofertará estas dos unidades.
Desde Ustea Cádiz avisan del “desconcierto” que ha provocado esta medida entre muchos directores de comunidades educativas de la zona norte, una de las más demandadas y saturadas de la ciudad, y no entienden el doble rasero de la administración andaluza cuando se han dirigido a ella para abordar este tema. “¿No nos han dicho por activa y por pasiva en Planificación en Cádiz que ellos no podían tocar ni para cerrar ni para abrir líneas en la concertada?”, se pregunta Carlos Cabral, delegado sindical de Ustea Cádiz, que critica la “táctica” empleada por la Junta con los institutos.
En contraste con la oferta de una clase más de Secundaria en el mencionado centro, desde este sindicato de enseñanza recuerdan que en el pasado curso se recortaron líneas en los CEIP La Marquesa y CEIP Las Granjas, y este año la previsión es dejar de ofertarlas en otros cuatro centros: los CEIP La Unión, San Vicente de Paúl, Arana Beato y CEIP Elio Antonio de Nebrija. Pese a que la Junta justifica esta determinación en el descenso de natalidad, Ustea lo tiene claro. “En una maniobra de distracción se abre una línea en El Machado, otra en La Marquesa y otra en el Sagrada Familia. “Si miramos la cuenta se cierran un total de seis líneas y se abren tres”, lo que supone tres líneas cerradas en dos años. Las cuentas, advierten, “no salen”
