El desarrollo urbanístico de Croft entró en su fase final en agosto de 2009, coincidiendo con la apertura del periodo de alegaciones al documento aprobado en el Pleno municipal apenas un par de meses antes. Ya a principios de noviembre, la Junta de Gobierno local concedió a Rentas y Vitalicios S.L. las licencias para la demolición de diversas instalaciones bodegueras, la parcelación de la manzana 4 y la ejecución del primer proyecto de construcción del Conjunto Residencial Los Altos de Croft, consistente en 66 viviendas pareadas y una vivienda unifamiliar aislada, urbanización interior y zona común con piscina.
La crisis económica y financiera provocó que el desarrollo no llegara a consumarse, quedando el antiguo complejo bodeguero a merced de los jaramagos. Casi trece años después de aquello, ahora parece más próxima la puesta en valor de los puesta en valor de 247.740 metros cuadrados de suelo afectados por el Plan Parcial del Área 10-CR-1 Croft, que es el documento que se aprobó en ese lejano Pleno municipal de junio de 2009.
El grupo Ilerna Albor se ha hecho cargo del desarrollo de los suelos. Esta misma semana ha empezado a cumplir con la primera de las obligaciones contraídas con el Ayuntamiento, consistente en asumir el desdoble del único tramo de la antigua circunvalación que mantiene todavía doble sentido de tráfico. El tramo en sí apenas tiene trescientos metros de longitud, pero la actuación que se está ya acometiendo abre la puerta definitiva a un futuro complejo que tendrá como buque insignia un campus de Formación Profesional con más veinte titulaciones de grado medio y superior que debe estar ya en funcionamiento en septiembre de 2023. A partir de ahí aún quedará espacio para el desarrollo de un parque comercial que aprovechará dos enormes cascos bodegueros que transcurren paralelos a la actual avenida Reina Sofía.
El plan aprobado en 2009 reservaba 24.074 metros cuadrados a zonas verdes y espacios libres. De igual modo, destinaba 16.179 metros cuadrados a equipamientos. De ellos, 8.918 se reservaron para uso educativo; mientras que 4.459 tendrían uso deportivo; 1.486 serían de uso comercial; y los 1.316 restantes tendrían uso social.
El proyecto de urbanización del sector 10-CR-1 Croft supuso la modificación puntual número 24 del anterior Plan General de Ordenación Urbanística (PGOU) que se encontraba vigente en 2005. De hecho fue en octubre de ese año cuando la comisión informativa de Política Territorial dictaminó de manera favorable a esta modificación, que permitía destinar la parcela a uso residencial y de actividades económicas.
Al fin, casi veinte años después...
Todo aquello que empezó a planificarse hace ya casi veinte años tiene como ya se ha dicho su punto de partida en las obras del desdoble del tramo pendiente de la antigua circunvalación, unas obras que se van a prolongar por espacio de cinco meses, estando previsto que el vial esté ya abierto al tráfico el próximo mes de diciembre. En paralelo se acometerá la urbanización interior de la parcela, un trabajo previo a la rehabilitación del casco bodeguero que Ilerna Albor va a transformar en campus de Formación Profesional. Los trabajos de desdoble de este tramo se van a llevar a cabo en el interior del antiguo complejo bodeguero y más concretamente en la parcela que discurre en paralelo a la avenida Reina Sofía, que pasará a incorporarse al viario público. Además, se dotará a la zona de espacios ajardinados a modo de separación natural entre el nuevo desarrollo de Croft y la propia avenida.
No hay que olvidar que Ilerna Albor pretende que en septiembre de 2023 ya esté en servicio su nuevo centro de formación, que con capacidad para 1.500 alumnos se convertirá en su “buque insignia” en Andalucía. Esa será la primera de las actuaciones que verán la luz en el antiguo complejo de Croft. Como ya se ha dicho, quedará pendiente el desarrollo del parque comercial, en el que tendrán incluso cabida proyectos hoteleros o relacionados con el ámbito sanitario.
La alcaldesa, Mamen Sánchez, ya ha expresado su agradecimiento a Ilerna Albor por la apuesta que ha realizado por la ciudad y que en principio le lleva a asumir una inversión de 1,2 millones de euros. Según la regidora, las obras que ahora se inician son “mucho más” que el mero desdoble de un tramo de la antigua circunvalación, toda vez que constituyen el primer paso para convertir a toda la zona “en un polo de atracción” que favorecerá la llegada de nuevas empresas y la generación de empleo. “Tenemos que agradecer la apuesta que realiza esta empresa por recuperar un sitio que llevaba años sin uso y degradado, y que dentro de muy poco tiempo estará lleno de vida y de jóvenes”, subrayó este miércoles coincidiendo con el inicio de las obras.
La alcaldesa aprovechó para destacar la utilidad del trabajo conjunto entre la administración pública y los inversores privados, entre otras cosas porque “sólo así los espacios muertos pueden convertirse en espacios vivos”. Una vez culminado el desdoble, los propietarios del suelo podrán solicitar las licencias necesarias para el desarrollo del campus de Formación Profesional, un proyecto que tendrá unos 8.000 metros cuadrados de superficie y para el que se estima necesaria una inversión de unos seis millones de euros.
