Casi cuatro años después de que se iniciara la investigación judicial se acaba de dar carpetazo a la causa por presunta corrupción en la Cámara de Comercio de Jaén. El Juzgado de Instrucción número 3 de Jaén ha archivado esta causa donde se investigaba la gestión contable en la Cámara durante el último mandato de Luis Carlos García Sánchez, que dejó la presidencia en marzo de 2014, y para otra decena de personas que estaban investigadas. Contra el fallo cabe recurso de reforma ante el propio Juzgado o de apelación ante la Audiencia Provincial. El titular del Juzgado número 2, Miguel Sánchez-Gasca, entiende que hubo irregularidades contables aunque no delito, toda vez de que la cantidad presuntamente recibida en ayudas y desviada de forma fraudulenta ascendió a 114.000 euros, mientras que el Código Penal establece (antes de su actualización) el límite de 120.000 euros para tipificarlo como delito. De igual forma, el juez entiende que no hay indicios suficientes para acreditar que exista apropiación indebida.
Además del entonces presidente, Luis Carlos García, quedan absueltos el anterior gerente, y varios empresarios a los que se les imputaron hasta ocho delitos: apropiación indebida, falsedad documental, estafa, fraude en las subvenciones, prevaricación, cohecho, malversación de fondos públicos y administración desleal. La investigación judicial se inició a raíz de la auditoría de la Junta de Andalucía, entidad tutelante de la Cámara de Comercio, donde se analizó la gestión entre julio de 2012 y diciembre de 2013. Una auditoría que reveló un “agujero” de 200.000 euros. La Junta llevó el caso a la Fiscalía que, a su vez, lo trasladó a los tribunales.
La causa judicial contra los exresponsables de la Cámara de Comercio de Jaén fue el culmen de la situación de crisis que ha vivido esta institución desde 2011. Fue en 2016 cuando la Policía Nacional detuvo al expresidente, Luis Carlos García, y otras seis personas (la mayoría de su equipo directivo) por graves irregularidades contables y financieras durante la gestión de la Cámara entre los años 2011 y 2013. Desde entonces, la Cámara, ahora en manos de la Junta, languidece y está en vías de extinción.