La Policía Nacional ha detenido a un individuo que responde a las iniciales L.C.D., de 55 años de edad, como presunto autor del robo con fuerza de nueve máquinas de aire acondicionado situadas en la azotea de un local comercial de la avenida Cristóbal Colón de la capital onubense.
Según ha informado la Subdelegación del Gobierno en una nota, los agentes de la Comisaría Provincial lograron detener a este individuo cuando supuestamente trataba de extraer el cobre de estas máquinas, "para lo cual no dudó en destrozarlas".
Así, fue una llamada al 091, informando de la presencia de una persona en el tejado del establecimiento, la que alertó al Cuerpo Nacional de Policía. De forma inmediata, los agentes se desplazaron hasta el lugar. Allí pudieron observar las nueve máquinas de aire acondicionado arrancadas de la pared y algunas de ellas desmontadas para extraer el cobre de su interior. Durante la detención de L.C.D, se le intervino un total de 20 kilos de cobre ya extraído.
Además, según el relato policial, los daños causados no se limitan exclusivamente a la maquinaria, también se vieron afectadas las tuberías de agua de la azotea, lo que provocó un importante derrame al almacén de la tienda.
El presunto autor de los hechos es vecino del local, ya que habita en una vivienda ocupada colindante al establecimiento, y cuenta con 20 antecedentes policiales por hechos similares.
HURTO DE COSMÉTICOS
De otro lado, agentes de la Comisaría Provincial de la Policía Nacional han detenido a dos individuos en un centro comercial situado en la avenida Federico Molina de la capital onubense, que "pretendían llevarse sin pagar varios productos cosméticos valorados en casi en 500 euros".
Los dos detenidos son un joven de 19 años natural de Las Palmas de Gran Canarias y que responde a las iniciales M.H.LL, y una mujer de 33 años y natural de Linares cuyas iniciales son MD.M.S, según ha informado la Subdelegación en una nota de prensa.
El vigilante de seguridad del centro comercial los reconoció por haber visitado el establecimiento durante toda la semana anterior, lo que le hizo sospechar que podrían estar dedicándose al hurto a pequeña escala. Por este motivo, decidió vigilarlos de manera discreta.
Así pudo comprobar cómo el joven cogía productos de la sección de cosmética "los guardaba en la mochila que portaba la mujer o en las mangas de su propia sudadera". Posteriormente, los dos se dirigieron a la línea de salida sin compra, pretendiendo pasar haciendo ver que no portaban efecto alguno.
De este modo, han explicado que allí se activó la alarma y dado que el vigilante ya conocía que se habían producido las sustracciones pidió a la mujer que vaciara la mochila, mostrando todos los efectos que pretendía apropiarse.
Entre la gran variedad de productos cosméticos que se pretendían llevar si pagar, una laca de uñas valorada en dos euros y cremas que cuestan más de 60 euros. Esta forma de proceder evidencia que no se trataba de delincuencia especializada con un objetivo concreto, sino que los dos detenidos hurtaban lo que les parecía "más fácil de coger y esconder con el objetivo de venderlo posteriormente a precios muy por debajo de su valor de mercado".
Personados en el centro comercial, los funcionarios policiales detuvieron a M.H.LL., el cual ya cuenta con otro antecedente anterior por hechos similares; y a M.D.M.S., con 14 antecedentes policiales por diversas razones.