El estudio Nieto Sobejano Arquitectos ha ganado el concurso para la rehabilitación del antiguo convento de Santa Clara para convertirlo en la séptima sede del Museo de Pontevedra.
La propuesta formulada por Nieto Sobejano se ha impuesto a la de los otros cuatro equipos finalistas: Kaan Architecten BV (en segundo lugar), la UTE formada por David Chipperfield y Carlos Seoane (tercer lugar), Kengo Kuma (cuarto) y Snohetta Oslo en UTE con Alfonso Penela (quinto).
El vicepresidente de la Diputación de Pontevedra, César Mosquera ha anunciado el resultado en una rueda de prensa en la que ha destacado el gran nivel de este concurso de ideas en el que "los problemas que se planteaban eran francamente complejos".
El ganador se lleva un premio de 60.000 euros y el resto tendrán 4 accésit de 30.000 euros. "El siguiente paso, que en principio no vamos a dar, es adjudicarle la redacción del proyecto al ganador", ha apuntado Mosquera, "eso, en principio, queda para la próxima Corporación a menos que tengamos alguna comunicación por parte del próximo gobierno de que lo hagamos para ir ganando tiempo".
Por su parte el director del Museo de Pontevedra y presidente del jurado, Xosé Manuel Rey, ha expresado la "satisfacción tan grande" de los miembros del jurado por este proceso de selección afirmando que ha sido "muy enriquecedor" aplicando la perspectiva de diferentes disciplinas y ha destacado "el extraordinario trabajo y la gran calidad de la documentación de todas las propuestas".
Después de cuatro días de deliberación el jurado ha considerado que el proyecto "Verbas da pedra" responde "de manera sobresaliente al desafío de transformar un recinto con vocación de aislamiento en un lugar público".
El presidente del jurado ha recordado que "este proyecto tiene que madurar, tiene que evolucionar para acabar convirtiéndose en una solución definitiva" por lo que "queda, en el caso de que el proceso se materialice, una discusión muy profunda con todo el equipo del Museo para ajustar algunas disfunciones puntuales, algún desajuste, para reforzar partes muy potentes y para minimizar algunas cuestiones".
El jurado valoró positivamente cuestiones como la integración de un espacio que se convierte en un mirador hacia el claustro y que permite ordenar toda la circulación y toda la distribución de usos del complejo.
"Este es un proyecto de ciudad que no tiene que ver con una fuerza política u otra y que espero que haya altura de miras como para que nadie lo esté torpedeando", ha dicho César Mosquera, que considera que es una "garantía que el presidente de la Xunta dijera que no se iba a quedar fuera de Santa Clara".