La aparición de posibles efectos secundarios se reduce fundamentalmente a afectaciones locales propias de cualquier vacuna, como hematomas o sangrados leves
La Sociedad Española de Cardiología ha desmentido en un comunicado este miércoles que los pacientes con tratamientos anticoagulantes no puedan recibir la vacuna frente a la covid-19.
En un comunicado, el grupo de trabajo de Trombosis Cardiovascular de la Sociedad Española de Cardiología afirma que "no solo no ve contraindicada la vacuna, sino que la considera fundamental para el millón de personas que están bajo tratamiento anticoagulante por motivos cardiovasculares" en España.
Añaden que la aparición de posibles efectos secundarios se reduce fundamentalmente a afectaciones locales propias de cualquier vacuna, como hematomas o sangrados leves que no entrañan riesgos mayores para los pacientes.
Así, explican que, tal y como se especifica en la ficha técnica de la vacuna de Pfizer publicada por la Agencia Europea del Medicamento, las precauciones a tener en cuenta son las inherentes a cualquier inyección intramuscular".
Por todo ello, la Sociedad Española de Cardiología desaconseja la suspensión de la medicación anticoagulante para recibir la vacuna, si bien en los pacientes anticoagulados con fármacos antagonistas de la vitamina K (Sintrom y Warfarina) es recomendable confirmar que se encuentran en rango de INR (entre 2 y 3) antes de vacunarse.
Asimismo, en el caso de los anticoagulantes orales de acción directa (Pradaxa, Xarelto, Eliquis, Lixiana) sugiere evitar el pico máximo del fármaco en sangre, por ejemplo, administrando la vacuna antes de la toma de la dosis correspondiente.