PSOE y Ciudadanos se sentaron este lunes en torno a la misma mesa para someter a examen el pacto que ambos suscribieron hace ahora dos años para garantizar que Susana Díaz siguiera ocupando el Palacio de San Telmo. Con la legislatura en su ecuador y el nuevo escenario provocado por la derrota de la presidenta en las primarias socialistas, que le obliga a concentrarse en su gestión en Andalucía, los dos partidos coincidieron en que su alianza otorga “estabilidad” a la región, pero difieren sobre cómo pisar el acelerador a partir de ahora.
La formación de Albert Rivera lo tiene claro y fue rotunda tras la reunión de hora y media que mantuvieron ambas delegaciones: si los socialistas quieren seguir contando con su apoyo cuando a finales de año toque negociar los Presupuestos de 2018 el Gobierno regional tendrá que dar el paso decisivo de volver a aliviar los bolsillos de los contribuyentes en forma de otra reforma del Impuesto de Sucesiones y del tramo autonómico del IRPF.
A la cita en el Parlamento andaluz se le había dado rango de máximo importancia, de lo que da fe que al líder de Ciudadanos en Andalucía, Juan Marín, se le uniese el secretario general nacional de la formación, José Manuel Villegas, desplazado desde Madrid. Tras el encuentro, sintonía en que el camino recorrido de la mano entre ambos partidos da pie a más avances, aunque hay discrepancias en cómo avanzar. Marín ya había sido contundente a primera hora de la mañana en una entrevista radiofónica y recuperó su principal argumento tras la cita. La entrevista fue “cordial”, pero tras lo escuchado de boca de los socialistas se desprende que hay serias “diferencias” y “escollos” en materia fiscal. Tanto que si el PSOE no acepta sus propuestas fiscales “tendrá que buscar otro aliado” en el arco parlamentario para sacar adelante las cuentas públicas de 2018.
El miércoles 14 será el momento de calibrar si hay o no campo abonado al acuerdo. Ese día se reunirá el grupo de trabajo de ambos partido que estudia la armonización del IRPF autonómico, en el que Cs reclama otra bajada de punto y medio, y el Impuesto de Sucesiones y Donaciones. En el segundo caballo de batalla, innegociable para los de Marín, se reclama que se traslade a Andalucía un sistema similar al de la Comunidad de Madrid, que con su bonificación del 99% casi lo ha eliminado. “Es de justicia social”, subrayó el líder de Cs. Ahí el PSOE tira de su argumento base: debería ser el Gobierno central el que lo armonizase a nivel nacional. “Hay que echar cuentas” antes de decidir, deslizó Juan Cornejo.
Sí hay impulso para el otro paquete de medidas. En dos semanas se plasmará en decreto el proyecto de Oficina Antifraude y también entrará en el Parlamento la Ley de Emprendimiento. Antes de septiembre también se avanzará sobre la eliminación de aforamientos, limitación de mandatos y ley electoral. En septiembre estarán en la Cámara los proyectos de ley de Formación Profesional y de Agricultura, y entre octubre y noviembre las leyes de Sostenibilidad de la Sanidad Pública y de Atención Temprana. Y partir de septiembre la tramitación de la Ley Audiovisual, la reforma de la RTVA, la Ley de Cambio Climático y la de Violencia de Género.