El expresidente del Gobierno de Murcia, Pedro Antonio Sánchez, ha dicho este miércoles que dejará su escaño en la Asamblea de Murcia si llega el momento previsto en los Estatutos del PP, que obliga a dimitir a los cargos a los que se les abre juicio oral.
Sánchez se ha expresado así, en una entrevista en la Cadena Cope, recogida por Europa Press, cuando se le ha preguntado si dimitirá de su puesto de diputado regional si es "encausado". "Sí, sí, como cualquier afiliado cumpliré, es la línea roja que establecen nuestros Estatutos", ha dicho.
De hecho, ha defendido que, en su caso, el problema ha sido que "la exigencia va por barrios", y que Ciudadanos le impuso a él la interpretación "más dañina" debido a "intereses electorales". Sánchez dimitió este martes para evitar una moción de censura de PSOE, Podemos y Ciudadanos, partido que reclamaba su marcha tras haber sido llamado a declarar como investigado en el 'caso Auditorio'.
Sánchez ha reconocido que, en su acuerdo de investidura con Ciudadanos se hablaba de dimisión de los imputados, que era "el término que existía en la ley", pero ha argumentado que, con la supresión de esta palabra en la ley, hubo quien lo equiparó con la figura de "encausado" y otros con la de "investigado". Es más, ha denunciado que Cs "en toda España" lo equiparó a "encausado" y solo a él le aplicó la de "investigado".
En todo caso, ha asegurado que ahora no está pensando en su futuro político, sino en "ser útil", especialmente después de haber sido elegido presidente del PP de la Región y en esperar a ver cómo evolucionan los acontecimientos.
SU MARCHA QUITA PRESIÓN A LA JUSTICIA
Además, está convencido de que su decisión de dejar la Presidencia "quita presión a la Justicia, y eso es bueno", y ha pedido dejarla trabajar "sin condicionantes, sin exigirle tiempos" y con una "normalidad de la que nunca se tuvo que haber salido".
Según ha dicho, decidió marcharse cuando tuvo "información certera" de que PSOE, Podemos y Ciudadanos tenían cerrado el acuerdo para un "tripartito", un gobierno que estaría formado por socialistas pero con el apoyo parlamentario de Podemos y Ciudadanos, cosa que sería "meter a Murcia en un callejón sin salida".
Por otro lado, no tiene la sensación de que el PP le haya "dejado caer", sino que ha agradecido el "respeto y apoyo" de la dirección nacional, la "confianza" que le han dado y la "autonomía" de su decisión, así que se ha mostrado "orgulloso" de pertenecer al PP, que es "un partido justo".
Sánchez no ha querido "generar polémica" sobre la oportunidad del auto del juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco --que pide que se le investigue en el 'caso Púnica' y que se conoció el lunes-- pero ve "una obviedad" que "hay hechos que acentúan ciertas situaciones".
NI UN PRECONTRATO CON DE PEDRO
Sobre este caso, ha defendido que su defensa ha presentado 14 certificados oficiales, firmados por funcionarios, donde se demuestra que no hubo ningún contrato con la empresa de Alejandro de Pedro, ni ninguna petición de oferta, aunque esta empresa ofreció sus servicios "insistentemente" durante casi un año. "De puertas adentro de la Administración no se movió un papel para llevar a cabo ningún acuerdo con estas empresas", ha proseguido.
Es más, ha asegurado que, mientras en las escuchas telefónicas los representantes de la empresa hablan de que esos trabajos deberían ser cargados al capítulo de Formación de su Consejería, esa partida ni siquiera existía y que eso es "el colmo de la evidencia de que no hubo nada".
Dado que Velasco ha enviado la causa al TSJ de Murcia, espera que este punto sea "más sencillo de aclarar porque es muy fácil de demostrar".