El rey Mohamed VI no recibirá finalmente al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, durante su visita de este miércoles y jueves a Rabat para la cumbre bilateral sino que le ha emplazado a una próxima visita oficial, según ha anunciado Moncloa.
Sánchez ha mantenido una conversación telefónica con el monarca alauí antes de poner rumbo a Rabat durante la que ha aceptado la invitación de este a "realizar próximamente una visita oficial" a Rabat, ha precisado el Gobierno en un comunicado. La Casa Real alauí también ha confirmado la llamada.
Desde el Gobierno no se había querido confirmar en ningún momento el encuentro con Mohamed VI, esgrimiendo que era la Casa Real alauí la que tenía que anunciarlo de producirse y que el objetivo de viaje era la Reunión de Alto Nivel (RAN), en la que participa el Ejecutivo marroquí, encabezado por su primer ministro, Aziz Ajanuch.
Fuentes gubernamentales han precisado que la llamada se ha prolongado por espacio de media hora y han puesto en valor la implicación del monarca marroquí en persona en "lograr los mejores resultados" en la cumbre de este jueves.
En su comunicado, la Casa Real alauí ha indicado que Mohamed VI ha invitado a Sánchez a una visita oficial "muy próximamente" a Marruecos con vistas a "reforzar esta dinámica positiva en la asociación estratégica bilateral excelente" que hay entre los dos países.
"Esta visita será la ocasión para reforzar aún más las relaciones bilaterales, a través de acciones concretas marcadas por la eficacia y proyectos tangibles en cuestiones estratégicas de interés común", ha adelantado la Casa Real alauí.
Sánchez y Mohamed VI ya se reunieron el pasado 7 de abril a raíz precisamente de una conversación telefónica que mantuvieron el 31 de marzo, dos semanas después de la carta en la que Sánchez trasladó al rey alauí que España consideraba el plan de autonomía marroquí para el Sáhara como "la base más seria, creíble y realista" para resolver el contencioso.
Entonces, el rey no solo recibió al presidente del Gobierno sino que le invitó, junto al ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, y al embajador español en Rabat, Ricardo Díez-Hochleitner, al 'iftar', la cena con la que los musulmanes rompen el ayuno, junto al príncipe heredero, Mulay Hasán, y el hermano del monarca, Mulay Rachid.
De aquel encuentro salió una declaración conjunta que ha servido de 'hoja de ruta' para la relación en los últimos meses, permitiendo reforzar la cooperación en ámbitos como el migratorio o mejorar los datos de comercio, entre otros, y cuyos resultados serán objeto de análisis en la cumbre de este miércoles y jueves.
Precisamente, la Reunión de Alto Nivel (RAN) de este jueves, la primera desde 2015, ha sido el tema de la conversación mantenida este miércoles entre ambos, en la que han acordado "seguir impulsando la relación" bilateral.
En este sentido, según Moncloa, los dos han coincidido en que la cumbre "será un éxito" y contribuirá a "consolidar la nueva etapa en las relaciones entre Marruecos y España".
Por su parte, Mohamed VI se ha felicitado de la evolución de la nueva fase en la relación bilateral "en la concertación, la confianza y el respeto mutuo" y ha destacado que los compromisos que se recogieron en la declaración del 7 de abril "se han puesto en marcha de forma sustancial", según el comunicado de la Casa Real alauí.