El teniente de alcalde de Cultura del Ayuntamiento de El Puerto de Santa María, Enrique Iglesias, señala que la presentación del libro de aforismos “No es locura, es claridad” (Ed. Isla de Siltolá), de Rosario Troncoso, acto que acogió la Biblioteca “Poeta Rafael Esteban Poullet” (C/ Larga, 89), ha puesto el punto final a la programación que el área municipal ha diseñado con motivo del Día del Libro. De esta forma, durante los días 23, 24 y 25, las Bibliotecas Públicas Municipales “Poeta Rafael Esteban Poullet” y “María Teresa León”, el Palacio de Araníbar y la Sala Stardust han sido escenario de distintas presentaciones literarias, cuentacuentos infantiles, conciertos que aúnan música y literatura, encuentros de clubes de lectura y la inauguración de una exposición del Centro Andaluz de las Letras, en un programa con el que la Concejalía ha querido acercar la literatura a los más pequeños y fomentar y promocionar los hábitos lectores y la cultura en general en toda la sociedad.
Con “No es locura, es claridad”, Rosario Troncoso (Cádiz, 1978), se lanza al mar del aforismo, con todo su horizonte e infinitud, buceando en las cosas que son importantes en la vida y tratando de comprender el mundo. Profesora de Lengua Castellana y Literatura, gestora cultural, editora, crítica literaria y articulista en prensa, ha publicado diversos y notables poemarios, y su obra, recogida también en numerosas antologías y revistas, ha sido traducida al hindi, inglés, alemán e italiano.
La profesora Carmen Heredia fue la encargada de disertar sobre la autora, considerando que “aunque no lo parezca, este es un libro de poesía, que tiene la particularidad de que se puede empezar desde cualquier parte” y valorando su ayuda en sus clases de Arte.
Rosario Troncoso explicó que los aforismos, que tienen su origen en la tradición grecolatina, cabalgan, a su entender, entre la poesía y la filosofía. “El aforismo, que suele requerir de cierta formación para su comprensión”, abundó, “es literatura de la inmediatez”, apuntando que el título de la obra es el que cierra el libro, ya que contiene el espíritu del volumen: “reflexionar sin que nadie me manipule”.
Entre otros citó: “No hay que temer a la incertidumbre, es lo más parecido a la esperanza”, “Es en ese tiempo sólo tuyo cuando más eres de los otros”, “Aquello que duele es porque no se conoce bien o se conoce demasiado” o “Mirar demasiado una cicatriz abre una herida nueva”.
