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#RoboAlCadiz, el cadismo estalla

Las críticas de la afición y la prensa se centran en el árbitro Ais Reig, cuya actuación condicionó el resultado y fue clave para la remontada del Mirandés

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  • expulsión de Santamaría -
  • La expulsión de Gorka y el penalti, protestados

Cuando en media hora el Cádiz ganaba 0-2 a un Mirandés desbordado nadie imaginaba que el resultado final sería de 3-2. Pero aún menos se esperaba que a partir del minuto 35 los amarillos jugaran con diez y los locales con doce.

La expulsión de Santamaría fue la primera piedra en el camino cadista. Dos amarillas, cada cual más absurda, enviaban al delantero a la caseta con casi una hora de partido por delante. La primera amonestación llegó mientras bebía agua en la celebración del 0-2. Según el acta, por “retrasar la puesta en juego del balón con ánimo de perder tiempo”. Pero claro, cuando se analiza la segunda tarjeta, producto de un levísimo agarrón y un tropezón consigo mismo que molesta pero no derriba al contrario, se nota una falta de rigor absoluta en el acta de Ais Reig: “sujetar a un adversario, derribándole e impidiendo su avance”.

Los nervios comenzaron a llegar a un Cádiz que, sin ser un partido violento, ni con tanganas, terminó el partido con una tarjeta roja y ocho amarillas, a las que se suma la amonestación a Cervera.
Las redes ardían de indignación y #RoboAlCadiz era uno de los temas más comentados a nivel nacional. Pero aún quedaba mucho por ver.

Un penalti muy dudoso
El Mirandés terminó de meterse en el partido a los cinco minutos de la reanudación. Su primer gol llegó de penalti tras un ¿agarrón? de Garrido dentro del área. Los locales, con viento arbitral a favor, se encontraron con un penalti en el que basar su remontada.

El partido ya era otro y el Cádiz, que también cometió errores graves en el segundo y tercer gol, estaba desquiciado. Cervera tampoco acertó al retirar a sus dos extremos y renunciar al ataque dando entrada a los debutantes Sankaré y Abdullah.

Quejas en el vestuario
“Por suerte o por desgracia el partido ha sido televisado”, recordaba Mantecón tras el choque, asegurando que “la primera amonestación de Gorka ha sido por beber agua y parece que no se podía, pero ellos sí lo hicieron después”.

Por su parte, el también debutante Rubén Cruz se refirió a ambas acciones como “dos tarjetas que el árbitro ve”.

Y Cervera cree que “mientras el partido estuvo igualado, hasta el 0-2, estuvimos mejor, pero a partir de la expulsión un equipo fue mejor que otro”. “Sobre la roja, la primera tarjeta es por beber agua... estando a 33 grados creo que debería tenerse algo más de lógica y ya la segunda se puede sacar o no”, decía, triste por lo vivido, pero consciente de que no queda otra que seguir trabajando.

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