La delegada municipal de Cultura, Pepa Vela, y el director del Museo de Chiclana, Jesús Romero, han presentado una nueva exposición temporal en estas instalaciones. Se trata de la muestra ‘Entre dos Luces, del Románico al Gótico’, que estará abierta al público hasta el próximo 27 de agosto. Esta exposición contará con más de un centenar de piezas de diferentes materiales, entre los que destacan las tallas en madera, la piedra tallada, el estuco, los bronces esmaltados o las terracotas. Todas ellas son réplicas de los siglos XIX y XX, todas únicas, ya por su carácter artístico o por su carácter artesanal, y darán lugar a la reflexión que sobre estos estilos del Medievo propone el Museo de Chiclana.
Pepa Vela ha señalado que se trata de una muestra “de carácter didáctico, dada la época del año en la que nos encontramos, con una exposición de dos estilos que no se encuentran en la zona, como son el Románico y el Gótico”. Además, ha invitado a toda la ciudadanía y a todos los visitantes a disfrutar de esta exposición.
Por su parte, Jesús Romero ha explicado que “esta muestra está pensada para el alumnado, aunque se prolongará hasta finales de agosto para no negar al turista aquello que montamos con este carácter didáctico”. Además, con respecto al título de la exposición ha reseñado que “es un guiño a un tópico de la Edad Media como es el de ‘los siglos oscuros’, hablando de esas luces del Medievo, centrándonos en la luz del Románico y en la luz del Gótico”.
Cabe reseñar que, aunque con frecuencia se han definido los siglos del Medievo como los siglos oscuros, el Museo propone acercar al público a la Edad Media desde algunas de sus luces. En este caso, desde las luz más propia del Románico y la luz del Gótico, esa que va de los pequeños templos íntimos, oscuros y no muy altos de la alta Edad Media, hasta las esbeltas catedrales tardomedievales de amplios vanos y luminosas vidrieras.
Se trata de un hilo filosófico, el que atraviesa esos siglos en los que el Platonismo cede su hegemonía al pensamiento aristotélico, el recorre esta exposición de pintura y escultura, en la que se ve evolucionar la figura humana desde concepciones minimalistas, casi conceptuales a formas más realistas y naturales hasta el triunfo del retrato, que es el triunfo de lo individual.
Con esta exposición se complementa las otras que componen el plan expositivo anual del Museo, presentado en su integridad por la delegada de Cultura a comienzos de año. Así pues, el objetivo es acercar al alumnado de la ciudad y cuantos visitan estas dependencias, unos estilos artísticos inusuales, puesto que son más propios del norte.
Esta nueva exposición temporal del Museo de Chiclana ocupará, dada la amplitud de la muestra, las dos salas reservadas para las temporales. Esta división en dos salas lo será también a efectos temáticos, dedicándose la Sala 1 íntegramente al Románico y la Sala 2 al Gótico.
