“Lo que yo quiero es que los españoles conozcan su guerra”, afirma la descendiente de Negrín en una entrevista a Efe en el apartamento de París en el que el político pasó sus últimos años de exilio, después de dimitir como representante del Gobierno republicano depuesto.
En el que fuera el despacho de Negrín, tapizado con libros y antiguas fotografías, su nieta define a aquellos que trabajaron para la Segunda República como “gente muy valiosa y muy valiente, que merece ser recordada con toda la dignidad que les corresponde”.
“España fue el primer país en luchar contra el fascismo, pero nadie se lo reconoce, ni siquiera ellos mismos”, dice en referencia al desconocimiento sobre la historia.
Por eso, considera necesario recordar que las mujeres obtuvieron en España el derecho al voto “mucho antes que en Francia”.