Sebastián Nayar (Buenos Aires, 1988) está cansado de esperar el transfer que le permita jugar en la Liga española. El mediocentro lleva cuatro meses en Huelva sin poder debutar en partido oficial con el Recreativo. “Me han dicho que lo más tarde el lunes dictaminará el TAS”, confesaba el argentino. “La verdad es que se pasa muy mal. Es como si te estuvieran pegando y no pudieras responder”, explica Nayar sobre sus sensaciones durante todo este tiempo.
“Estaba tranquilo porque yo no he firmado nada, pero cuando ves que la FIFA acepta los papeles empiezas a preguntarte si has firmado dormido”, reconoce el futbolista del Recreativo. Lo ha pasado mal Nayar y lo sobrelleva como puede con el respaldo de “Los que te quieren”, en especial de su primo Nicolás que se ha venido a España con él y de su novia. “Ha habido gente que no me ha creído”, reconoce el joven centrocampista.
Sobre la posibilidad de que el Tribunal Superior de Justicia Deportiva (TAS) dictamine en su contra, admite que “entonces nos tendremos que sentar, bueno, mi representante y el club y resolver esto”. “Está claro que quiero quedarme y demostrar que soy apto para jugar en una de las ligas más importantes del mundo, pero si no me dan el permiso tendré que volver, eso sí, con un paraguas”, confiesa.
Nayar está dispuesto a volver a Boca si no se resuelve pronto. "Lo que no puedo hacer es reclamar de nuevo, esperar dos meses que serán tres o cuatro y ver qué pasa. Lo último que me planteo es abandonar el fútbol, pero tampoco voy a estar un año en blanco”, reconoce.
Agotadas en la primera tarde las entradas de 40 euros
Una tarde han tardado en agotarse las entradas para presenciar el sábado en el Santiago Bernabéu el Real Madrid-Recreativo, partido correspondiente a la duodécima jornada de Liga. Las localidades enviadas por el club madrileño a un precio de 40 euros salieron el lunes a la venta y ayer ya tuvo el Decano que solicitar una nueva remesa. La entradas enviadas por el conjunto merengue cuestan 45 euros y podrán adquirirse en las taquillas del estadio hasta el jueves.