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La novena provincia

Estaciones de servicio automáticas

En unos momentos en los que estamos sufriendo ciberataques, lobos solitarios o locos que pueden llegar a hacer mucho daño, no es comprensible que se permitan.

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ESTACIONES DE SERVICIO AUTOMÁTICAS

  Yo utilizo para echar combustible una estación de Servicio Low cost, no lo voy a negar. Pero la que utilizo (en Algeciras) tiene sus empleados e, incluso, si te sacas tu tarjeta tienen un mayor descuento o bien sirven para obtener puntos para un lavado de coches.

  Pero es que ahora empiezan a proliferar Estaciones de servicio automáticas que no tienen ni un solo empleado.
En España hay nueve Comunidades autónomas que las han prohibido, entre ellas Andalucía, pero según  la Asociación Nacional de Estaciones de Servicio Automáticas,  la Junta de Andalucía no ha sancionado a ninguna de estas gasolineras desatendidas.

  Dicen, además, que esto está totalmente extendido en Europa pero yo no voy a entrar en si es bueno o no, o si hace falta un mínimo de dos empleados (que entiendo que sí), sino que voy a entrar en el tema de la seguridad.

  En unos momentos en los que estamos inmersos en ciberataques, lobos solitarios o simplemente locos que pueden llegar a hacer mucho daño, no es en absoluto comprensible, al menos para mí, que se permitan estaciones de servicio que estén totalmente desatendidas.

  En mi artículo anterior hablaba de la FRAGILIDAD HUMANA, a colación, precisamente, de estos ciberataques que tenemos en estos días y de que las nuevas tecnologías nos someten también a una fragilidad enorme porque cualquier loco puede llegar a hacer daño a muchas personas. Ha ocurrido en Paris, Londres, Madrid  y  otras muchas formas de hacer daño, entre las que puede estar una estación de servicio automática y desatendida que, además, está abierta las 24 horas. Las estaciones de servicio tienen unos enormes depósitos de combustible que si no están vigilados por empleados de las mismas pueden ser objeto desde actos vandálicos (siendo estos, lo mínimo que se les puede hacer) hasta  convertirlas en auténticas bombas de relojería.

  En una situación de alerta cuatro sobre cinco que tenemos en España o la máxima que tiene Francia, resulta  difícilmente comprensible que esto se permita.

  Espero y deseo que la Junta de Andalucía cumpla  con sus propias prohibiciones y obligue a estas estaciones de servicio automáticas a tener un mínimo de dos empleados que controlen las instalaciones.

Algeciras a 16 de mayo de 2017
Patricio González

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