El coordinador general de Cruz Roja de Cádiz, Javier Gil, señala que “cada vez son más las personas con un nivel social mayor que acuden a los servicios de las unidades móviles de emergencia social, que bajan de sus casas cuando llega la unidad a tomar un plato de sopa o comerse un bocadillo”.
Entre las personas que recurren a los servicios de las unidades destacan en lo que va de año “las familias que vuelven a casa de sus padres, los jubilados y las personas con ingresos mínimos”, indica Gil quien también subraya el “aumento de solicitantes entre los inmigrantes”.
“Cada vez más personas afectadas por la crisis y con niveles medios de cualificación bajan a ser atendidos por las unidades de emergencia social”, insiste el coordinador general que coloca la situación de Cádiz en este aspecto de forma destacada dentro del informe de vulnerabilidad a nivel estatal -el último publicado en marzo- que habla de que en toda España había en esa fecha 1.328.000 hogares con todos sus miembros desempleados.
Al aumento de las asistencias por las unidades móviles de emergencia social se suma el notable incremento en toda la provincia del programa de reparto de alimentos.
Ante esta circunstancia, la Cruz Roja ha decidido llevar a cabo proyectos que implican la puesta en marcha de puntos de información para el empleo, dado que la organización considera que muchos de los atendidos por la unidades móviles de emergencia social y de los que acuden al programa de reparto de alimentos son trabajadores desempleados, además de personas en situación de exclusión social y los sin techo. De hecho, indica Javier Gil, “el 50 por ciento de los recursos del programa de Lucha contra la Pobreza y Exclusión Social que llevamos a cabo se destinan a paliar situaciones sobrevenidas por la crisis”.
En los puntos de información para el empleo que habilitará Cruz Roja se redactarán currículos y se llevará a cabo una búsqueda activa de empleo.
De forma paralela, la organización también incrementará los esfuerzos y recursos en el trabajo con los menores de familias en peligro de exclusión social, llevando a cabo programas de apoyo escolar con clases particulares y seguimiento en los colegios, y de asistencia a los centros educativos para reducir “el aumento del absentismo escolar que venimos detectando”, puntualiza el coordinador general de Cruz Roja de Cádiz.
