Felicidad para todos

Eduard Punset, en el prólogo de su libro "Viaje a la Felicidad" explica que hace poco más de un siglo la esperanza de vida era aún de treinta años, lo justo para aprender a sobrevivir, por lo que no cabía la posibilidad de plantearse la felicidad. Esta era una cuestión que se esperaba después de la muerte. Con el aumento de la esperanza de vida, la Humanidad se encuentra con el futuro y se plantea cómo ser feliz aquí y ahora.

Pero ¿Dónde está el secreto de la felicidad? Un equipo de psicólogos británicos, encabezado por Pete Cohen, afirma que han deducido una fórmula para medirla y la expresan así: Felicidad = P + (5xE) + (3xN); donde la variable "P" representa las características personales como filosofía de vida, capacidad de adaptación y resistencia. "E" sería la variable más importante y se multiplica por un factor de cinco porque representa la "existencia"; es decir, la salud, la estabilidad financiera y las amistades. Por último, "N" representa las "necesidades prioritarias" como la auto-estima, las expectativas que tenemos de nuestra vida, la ambición y el sentido del humor.

Otro hallazgo de este estudio es que cuatro de cada diez hombres señalaron que practicar el sexo con frecuencia les hacía felices y tres de cada diez decían que la felicidad llegaba cuando ganaba su equipo favorito. En cambio, siete de cada diez mujeres mencionaron tener una familia como motivo de máxima felicidad. Por otro lado, una de cada cuatro consideraba como motivo satisfactorio el hecho de bajar de peso. Lo que parece común a todos es que que cuando obtenemos lo que perseguimos y deseamos, disminuye nuestro nivel de felicidad. Lo mismo dice el científico Robert Sapolsky, quien afirma que es en la anticipación del placer donde reside el placer, justo cuando se produce en nuestro cerebro una descarga de dopamina.

Sea cual fuere el motivo que nos hace felices, basta con desearlo intensamente para conseguirlo (al menos eso demuestran los últimos estudios de la Física Cuántica aplicada a la Psicología).