La campaña de control y vigilancia de consumo de alcohol y drogas desarrollada por la Dirección General de Tráfico (DGT) entre el 5 y el 11 de diciembre se ha cerrado con un total de 19.674 conductores, de los que 331 dieron positivo en alcohol y/o drogas, es decir, el 1,68% del total, manteniéndose estable este porcentaje respecto a la campaña anterior, que tuvo lugar en agosto de 2022.
Esto supone que 47 conductores al día fueron detectados por los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil conduciendo tras haber consumido alcohol y/o drogas, la mayoría de ellos (78%) tras un control preventivo y el resto por infracciones, accidentes o por presentar síntomas.
En el caso del alcohol, los conductores profesionales, los motociclistas y los conductores noveles han representado el 7,4% de los positivos en esta campaña, con 3, 8 y 7 casos, respectivamente, según han informado desde la Delegación del Gobierno de España en Andalucía.
En términos generales, de las 19.507 pruebas de alcoholemia realizadas, 244 resultaron positivas (1,2%). De éstas, 185 (75,8%) fueron detectados en controles preventivos, 23 (9,4%) tras haber cometido una infracción, 34 (13,9%) por estar implicado en un accidente y 2 (0,8%) por presentar síntomas evidentes de ingesta de esta sustancia. Además, contra 43 conductores se han abierto diligencias y han sido puestos a disposición judicial por conducir con una tasa superior a 0,60 miligramos por litro en aire.
Respecto a las drogas, de los 87 conductores que dieron positivo a alguna sustancia, como viene siendo habitual, la mayoría lo hicieron por cannabis (80,5%), seguidos de los que lo hicieron por cocaína (34,5%), anfetaminas y metanfetaminas (17,2%) y opioides (4,6%). Durante la presente campaña, no ha sido puesto a disposición judicial ningún conductor por conducir bajo la influencia de sustancias psicotrópicas o por negarse a realizar el test de drogas.
Estas campañas sirven para detectar a aquellos que infringen la ley, pero también para alertar y concienciar de todos aquellos conductores que, aun no siendo denunciados por no superar la tasa máxima permitida, sí se ponen al volante de un vehículo habiendo ingerido alcohol.
En esta ocasión, en los controles realizados con motivo de esta campaña más de 300 conductores fueron detectados con tasas inferiores al límite máximo permitido, 262 en controles preventivos, 26 por una infracción y 16 tras un accidente.