"Difícilmente podremos educar en valores democráticos cuando en los centros no existirá tal democracia, sólo el criterio y decisión de la Dirección", decían en un comunicado.
En esta línea, explican que "no pueden desaparecer los departamentos didácticos o crearse a discreción de las direcciones, ya que los jefes de Departamento deben ser elegidos por decisión de los componentes de éstos, no por el criterio unipersonal de la Dirección", continuaban.
Y es que el "Claustro no puede ser silenciado por ninguna Administración democrática y el profesorado que lo constituye debe tener capacidad de opinión y participación en el funcionamiento de un centro".
Ante esta situación aseguran que "lo que se está promoviendo son métodos de gestión economicista y privada para los centros educativos públicos andaluces, dirigiéndolos a un modelo mercantilista de la enseñanza".