Provocó la muerte de un compatriota suyo, ha asegurado en el juicio que él tan solo era un pasajero de la embarcación
Un ciudadano argelino acusado de patronear la patera que chocó en la madrugada del 17 de mayo de 2021 con un buque de la Guardia Civil frente a la costa almeriense, lo que provocó la muerte de un compatriota suyo, ha asegurado en el juicio que él tan solo era un pasajero de la embarcación.
El fiscal ha mantenido en la vista, celebrada en la Audiencia Nacional, su petición de siete años de prisión para el acusado como presunto autor de un delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros.
Por su parte el abogado defensor ha solicitado su absolución ya que a su juicio se ha acreditado que el patrón de la patera no era su representado sino otra persona que en el momento de los hechos tenía la cara tapada con un pasamontañas.
En todo caso ha reclamado que se tenga en cuenta la circunstancia atenuante de dilaciones indebidas en el procedimiento, que se iba a juzgar inicialmente en la Audiencia Provincial de Almería, y ha estimado que la causa debería seguirse por supuesto homicidio ya que todas los ocupantes de la patera coincidieron en que fue el buque de la Guardia Civil el que golpeó contra ellos.
El acusado ha asegurado que él era uno más de los migrantes que viajaban en la patera y que el dinero que le fue encontrado en el zapato lo tenía guardado para poder sobrevivir y ha relatado que el buque de la Guardia Civil no llevaba luces y que todo ocurrió en la oscuridad.
Otro ocupante de la patera ha testificado que el patrón era otro hombre que llevaba la cabeza tapada y no el acusado, que iba junto a el en la embarcación.
También han testificado los tres agentes que iban en el buque oceánico Río Segura del Servicio Provincial Marítimo de la Guardia Civil.
Han relatado que la patera, que no era visible ni con el visor nocturno, colisionó con el buque, que sí llevaba luces de navegación, y que tras oír el impacto iluminaron la zona y vieron la embarcación con los migrantes en su interior.
Uno de los agentes ha reconocido al acusado como la persona que estaba intentando arrancar la embarcación de nuevo.
Durante su informe el fiscal ha estimado que ha quedado acreditado que el acusado era el patrón de la embarcación, de 5 metros de eslora y 1,5 de manga, con un motor fuera borda sin matrícula en la que viajaban catorce argelinos indocumentados, algunos de los cuales cayeron al agua tras colisionar con el citado buque sobre la una de la madrugada de la fecha referida, produciéndose la muerte de uno de ellos.
Ha añadido que la embarcación había partido de la costa argelina sobre las nueve de la noche del 16 de mayo anterior y ha mantenido que el acusado actuaba en connivencia con otras personas no identificadas encargándose de la organización del viaje y del cobro a los inmigrantes de una cantidad aproximada de 1.500 uros por su traslado a las costas españolas.
El fiscal ha destacado que tal como han acreditado los peritos el viaje se desarrolló en una embarcación carente de toda medida de seguridad y era de un tamaño insuficiente para transportar a las personas que iban en su interior y para la distancia que estaban recorriendo.
Ha recordado que tras la colisión murió uno de los migrantes y varios ocupantes sufrieron heridas por las que tuvieron que ser hospitalizados.