El Palmar pierde a su papa, que hace del amor su única fe
El amor bien vale renunciar a un papado o eso ha debido sentir el ya exresponsable de la Iglesia de El Palmar de Troya, que ha renunciado a su papado bajo el nombre de Gregorio XVIII para apostar por una nueva vida con una técnico de Monachil (Granada) ante un revuelo del que ambos quieren huir