La Fiscalía de Granada ha pedido dos años de prisión y el pago de 1.920 euros de multa a un hombre de 62 años al que acusa de utilizar "un sello de empresa inexistente y un CIF inventado" para supuestamente estafar a un intermediario de productos alimentarios quedándose con cinco pedidos de leche valorados en más de 68.086 euros que no habría abonado.
Habría actuado "con ánimo de obtener ilícito beneficio y aparentando una solvencia de la que carecía, a finales del mes de abril de 2018", según consta en el escrito de conclusiones provisionales del fiscal, al que ha tenido acceso Europa Press.
Así, se habría puesto en contacto telefónico y por correo electrónico con el supuestamente estafado "efectuando al mismo el 4 de mayo y el 29 de junio siguiente hasta cinco pedidos de leche", todo ello sin haber "creado empresa alguna, ni habiéndose dado de alta, ni teniendo trabajador alguno".
"Para reforzar la apariencia de solvencia empresarial de la que carecía", el acusado, según prosigue el fiscal, "utilizó" un nombre comercial no registrado por él, "un sello de empresa inexistente y un CIF inventado", recibiendo posterior y "puntualmente los cinco pedidos" en una nave alquilada en Peligros, en el área metropolitana de Granada, y facilitando un número de cuenta para el pago convenido a 45 días.
"El acusado dispuso de la mercancía sin abonar hasta la fecha su precio, abandonando incluso la nave en junio de 2018 y haciendo imposible su localización", concluye el fiscal. Está previsto que los hechos sean enjuiciados el próximo 1 de julio en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Granada.
