La Fiscalía Provincial de Valencia ha abierto diligencias de investigación ante la gravedad de las imágenes de la residencia de ancianos Domus VI de Llíria (Valencia) y varios familiares han anunciado que presentarán denuncias tras retirar a sus mayores del centro.
Según han informado fuentes del Ministerio Público este miércoles, esta investigación se ha abierto de oficio, tras tener acceso a unas imágenes emitidas por Telecinco en las que puede ver a ancianos atados a sillas, con llagas o desnudos, supuestamente desatendidos para comer e incluso abandonados tras caer al suelo.
La Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas también investiga lo sucedido en esta residencia, que ya ha sido inspeccionada anteriormente por "varios incumplimientos graves" durante 2019 y a la que se ha impuso una sanción de 174.000 euros.
En un comunicado, la dirección de la residencia Domus Vi de Llíria (Valencia) ha negado que los internos de este centro hayan sufrido maltrato alguno y ha asegurado que el citado vídeo fue grabado por una extrabajadora a la que no se renovó por incumplir sus obligaciones.
La empresa ha explicado que la empleada que grabó las imágenes trabajó en el centro "solamente los meses de abril a agosto, como refuerzo del equipo de limpieza durante la crisis".
En referencia al contenido del vídeo, explican que "las imágenes corresponden a residentes del centro durante la etapa de confinamiento que, por su avanzada edad y problemas psicomotrices, habían sufrido una caída".
"En estos casos, y como no podría ser de otro modo, los empleados de DomusVi les atienden de manera inmediata, con total dedicación y posteriormente contactan con sus familiares para informarles en todo momento de la situación y estado de salud de los mayores".
Desde la Conselleria de Igualdad, el director general de Infraestructuras de Servicios Sociales, Enric Juan, ha confirmado que la empresa gestora de la residencia tenía "denuncias previas de familiares", tanto por el trato a los residentes como por deficiencias en materia de infraestructuras y "por ello se le impuso la multa".
Ha señalado que algunas de las deficiencias ya fueron subsanadas y ha subrayado que esta residencia "ha sido una de las más inspeccionadas en los últimos meses antes de la pandemia -cuatro visitas- e incluso en 2020.
"Desde ese momento -últimas inspecciones- no hemos tenido más quejas de las familias y por eso no se ha actuado", ha agregado.
Asimismo, ha ofrecido los recursos de la Conselleria para trasladar a internos o cambiar la modalidad de la prestación que reciben en caso de que la familia lo solicite.
Tras hacerse público el mencionado vídeo, varios familiares de internos han acudido este miércoles al centro y algunos se han llevado a fa iliares que estaban internos.
En declaraciones a los periodistas, Isabel Díaz, hija del anciano que sufrió una caída, ha asegurado que siente "rabia e impotencia" y que en absoluto entiende "cómo se puede hacer eso a un ser humano".
"Hay cosas que se pueden entender, un abandono puntual porque no dé abasto el personal, pero lo sucedido no. Me lo llevo -a su padre- a un hospital, y en función de lo que me digan los médicos actuaré, si está desnutrido o tienen algún golpe actuaré. Tengo claro que denunciaré, eso ha sucedido, no sabemos quién es el responsable, pero esos señores no se atan solos, hay falta de socorro".
Otra mujer, Mariló Madrigal, que tiene ingresado a su padrastro en el centro, ha relatado que su familiar sufrió la amputación de parte de un pié porque no se le curó adecuadamente una herida, y además, se le olvidó a quien lo atendía meterlo en una ambulancia para ser trasladado al hospital.
Otros familiares, en cambio, han explicado a los periodistas que jamás han visto "nada raro", ni han tenido constancia de maltrato alguno.
En una residencia gestionada por la misma empresa pero ubicada en Alcoy (Alicante) han fallecido más de 70 internos durante la pandemia (más de la mitad de los internos), y la Conselleria de Sanidad ha advertido "posibles negligencias graves" en el centro.
Por su parte, la Asociación de Empresas de Servicios para la Dependencia (Aeste) ha condenado los presuntos malos tratos a ancianos cometidos en la residencia Domus VI de Llíria, pero ha asegurado que es una situación puntual que no refleja la actividad diaria de las residencias.
La patronal de las residencias ha emitido su "condena firme" de estos hechos, pero ha aclarado que cada día más de 70.000 trabajadores realizan su labor con dedicación y cariño en las residencias.
"Estas imágenes suponen una gran decepción para ellos, y, en conclusión, para un sector que está trabajando duro en un contexto pandémico como el actual", ha indicado Aeste, que pide un registro nacional de profesionales que trabajan en estos centros para tener la "garantía" de que las personas que cuidan a los mayores lo hagan con "el respeto y la consideración" que requieren.