El diario marítimo británico Lloydslist publica que la primera fase de la implantación de este nuevo sistema estará en vigor antes de que finalice el presente año, estableciendo una plataforma de software que recogerá información sobre movimiento de buques.
La información será registrada en una plataforma informática en red para los operadores portuarios, que les permitirá conocer con eficiencia los horarios de buques y organizar los servicios para los armadores.
“Tendremos un espacio común en el que ellos y nosotros podremos añadir información”, declaró a Lloydslist el capitán del Puerto de Gibraltar, Peter Hall.
“Ambos nos beneficiaremos del sistema. Desde la perspectiva de los armadores, podrán disfrutar de un sistema coordinado y eficiente que reduzca las demoras y nosotros estaremos capacitados para anticipar las estancias de buques antes de su llegada al Peñón”.
Para marzo de 2010 también estará operativo el hardware que ofrecerá cobertura de radar e imágenes para todas las aguas que rodean Gibraltar.
El sistema incluirá también un receptor de identificación automática por satélite que dará cobertura a un radio de más de 60 millas alrededor del Peñón, tanto hacia el Mediterráneo como hacia el Atlántico.
Mayor seguridad
El nuevo sistema ayudará también a mejorar la seguridad de la navegación en las aguas limítrofes al Peñón. La implementación de un sistema de control de control de movimiento de buques fue recomendada hace años tras la colisión entre un crucero y un tanque, así como en la oleada de incidentes posteriores, hasta los más recientes como el New Flame o el Fedra.
En caso de producirse un accidente, los investigadores podrán reconstruir los hechos de forma rápida y fácil ya que el sistema habrá registrado todos los datos de movimientos, intercambios de voz, imágenes por infrarrojos y datos meteorológicos. “Es un gran paso hacia delante en todos los sentidos”, concluyó el capitán Hall.
Fondeadero este
Durante años el fondeadero de la cara este del Peñón ha sido un área muy popular entre los armadores para echar ancla y esperar órdenes. A pesar de estar incluidas dentro de las aguas de Gibraltar, existe poco control sobre lo que ocurre en este lugar. Un dato curioso es que el fondeadero era gratuito. Este año, todo ha cambiado.
La Autoridad Portuaria de Gibraltar está ahora cobrando a los buques que fondeen dentro de las tres millas de aguas que rodean al Peñón, el área de mar reclamado por Reino Unido como aguas territoriales. Asimismo se ha establecido un sistema de entrada y salida a este fondeadero con lo que ya los buques no podrán simplemente mirar y parar donde lo deseen.
Parte de los motivos de este endurecimiento de medidas han sido los accidentes que se han producido a lo largo de los últimos años, muchos de los cuales ocurrieron en esta zona.
El caso del Fedra fue un claro ejemplo. Se encontraba fondeado en la cara este y se dijo que estaba siendo sometido a reparaciones no autorizadas en la sala de máquinas a pesar de la advertencia de fuerte tormenta en la zona. El buque perdió el anclaje y fue arrastrado con sus 31 tripulantes a bordo, que fueron rescatados durante unas duras maniobras nocturnas.
A la vista de esto, el Gobierno de Gibraltar estimó que los buques que hacen uso del fondeadero de la zona este, exponen al Peñón y a sus contribuyentes a riesgos financieros y medioambientales. Estos riesgos, subrayó el Ejecutivo, deberían verse reflejados en un régimen de tarifas.
El Gobierno de Gibraltar pretende además extender las facilidades para la provisión de servicios portuarios a los buques fondeados en la zona este, tal y como es el caso en la actualidad en el fondeadero oeste, lo que ampliaría considerablemente la capacidad del Puerto del Peñón.
De ser una zona gratuita para todos, el fondeadero este está ahora dirigido estrechamente por la Autoridad Portuaria, que estima quién puede entrar y dónde puede fondear. Para el capitán del Puerto no se trata sólo de un tema económico, ya que ayudará a controlar la seguridad en la zona.