Un total de 18 mujeres han sido asesinadas a manos de sus parejas o exparejas en lo que va de 2020, y solamente una de las víctimas mortales se atrevió a denunciar su situación de maltrato ante los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado.
Fue Encarnación, la última mujer que se incorporó a las estadística oficial de víctimas mortales por violencia de género. Tenía 78 años y el pasado sábado fue asesinada presuntamente por su pareja, un varón de 62 años, en Las Palmas de Gran Canaria.
Había presentado dos denuncias por violencia de género, la última en 2019, pero no quiso continuar con el procedimiento. Precisamente su decisión de no seguir con el proceso hizo que su caso se quedara 'inactivo' en el Sistema de Seguimiento Integral en los casos de Violencia de Género (VioGén) y, de este modo, no fuera objeto de atención policial.
Todo caso denunciado de violencia de género pasa a formar parte del sistema VioGén, donde hay casos 'activos' --los que son objeto de atención policial, aunque cada uno con un nivel de riego atribuido--, y hay casos 'inactivos' --aquellos que se considera que, temporalmente, no es preciso que sea objeto de atención policial--.
RENUNCIA A SEGUIR POR "MIEDO"
En declaraciones a Europa Press, la presidenta del Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Ángeles Carmona, explica que normalmente, en víctimas de este tipo de violencia, esa renuncia se debe al "miedo al maltratador, a posibles represalias, a no ser creída" e, incluso "a un sentimiento de vergüenza" por parte de las víctimas. También puede responder a que muchas "normalizan" el maltrato por parte de sus parejas y exparejas y al hecho de "no querer perjudicar" a su agresor.
Según declara, en "más de un 50% de los asesinatos" por violencia de género en los que constaba denuncia previa la víctima se había acogido a la dispensa de la obligación de declarar, renunciando así a declarar contra él. Es más, "muchas de ellas" volvieron a vivir con el presunto agresor. "Sale empoderado", apunta Carmona.
Desde el Observatorio llevan tiempo defendiendo la necesidad de eliminar esa posibilidad del derecho a no declarar o de explorar otras vías para hacer que el proceso pueda seguir adelante sin la declaración. También abogan por "apoyar" a la víctima con otros recursos asistenciales en el caso de que no esté preparada para seguir adelante con la denuncia.
"Hay que investigar qué hay detrás, si deja el proceso porque está coaccionada o porque es una mujer con miedo", apunta Carmona, quien insiste en que "no necesariamente porque una mujer renuncie hay que sobreseer el procedimiento".
Eso fue lo que pasó en el caso de Encarnación, la última asesinada por su pareja en 2020. Fuentes de la Unidad de Violencia de Género de la Delegación del Gobierno en Canarias confirman a Europa Press que "no había seguimiento del caso" ya que "estaba inactivo".
18 ASESINADAS EN 2020; 1.051 DESDE 2003
Esta mujer, de 78 años, se ha convertido en la víctima número 18 en 2020 de esta lacra, la primera víctima del mes de abril y la segunda desde que empezó el Estado de Alarma. Ya son 1.051 asesinadas por violencia de género desde 2003, año en el que comenzaron a contabilizarse estas víctimas. En lo que va de año, hay contabilizada una víctima más respecto al mismo periodo del año pasado.
De los 18 crímenes contabilizados de manera oficial en 2020, aparte del último, constan denuncia previa en otro: el de una mujer de 36 años cuyo cadáver fue localizado en un contenedor en la localidad alicantina de Moraira el pasado mes de febrero. Pero en este caso la denuncia fue presentada por alguien del entorno, no por la propia víctima.
Catorce de las 18 asesinadas eran pareja de su presunto agresor en el momento del crimen, mientras que las otras cuatro eran expareja o estaban en fase de ruptura con él. Convivían con él catorce de las víctimas.
Por edad, cinco de las asesinadas presuntamente por su pareja o expareja tenían entre 41 y 50 años; cuatro de ellas tenían entre 71 y 84 años; otras cuatro tenían de 31 a 40 años; dos de las fallecidas tenían entre 21 y 30 años; otras dos más de 61 a 70; y una tenía una edad comprendida entre los 51 y 60. Eran españolas catorce de las 18 asesinadas, mientras que cuatro procedían de otro país.
Respecto a los presuntos agresores, 16 eran españoles, mientras que otros dos eran extranjeros. Cuatro de los presuntos maltratadores se suicidaron tras cometer el crimen, y cuatro lo intentaron.
Por territorios, Andalucía registra cuatro crímenes machistas. En Cataluña ha habido tres crímenes; otros tres en la Comunidad Valenciana; dos se cometieron en Castilla La-Mancha; dos fueron en Galicia; uno en Madrid, uno en Asturias, uno en País Vasco y otro en Canarias.
El número de huérfanos menores de 18 años a consecuencia de la violencia de género contra sus madres en lo que va de 2020 es de 11, y a 289 desde el año 2013 en el que se contabilizan. Un menor ha sido asesinado por esta causa en 2020, y desde 2013, se contabilizan 36.
Este es el recuento oficial, pero existe otro extraoficial de 'feminicidio.net', en el que hay registrados 34 feminicidios y otros asesinatos de mujeres en el año 2020 en España. Doce en enero, nueve en febrero, 11 en marzo, y dos en abril.
Las 18 víctimas oficiales de la violencia de género están incluidas en él, pero este registro extraoficial también incluye otros crímenes de mujeres, como 'feminicidios familiares' en los que se incluyen asesinadas, por ejemplo, por hijos; o 'feminicidios por prostitución'.
El teléfono 016 ofrece de información y asesoramiento jurídico en materia de violencia de género, no deja rastro en la factura, si bien es necesario borrarlo del registro de llamadas en algunos teléfonos.