Málaga Acoge ha iniciado una campaña para impulsar la reforma y adecuación que se está realizando en una vivienda donada por la familia de Francisco Salcedo y que servirá para que jóvenes extutelados tengan un lugar donde vivir una vez cumplida la mayoría de edad, cuando dejan de estar bajo protección de la Administración.
Estos jóvenes, una vez cumplida esa mayoría de edad, "quedan en la calle en una situación de vulnerabilidad", han precisado desde Málaga Acoge, por lo que "urge reforzar los recursos destinados a estos jóvenes en Málaga mediante la apertura de esta vivienda de acogida".
La asociación malagueña, según se indica en su página web, consultada por Europa Press, está embarcada en la remodelación de la casa José Antonio Rojo que compartirán cinco jóvenes. Esta vivienda lleva este nombre en reconocimiento a la labor de uno de los voluntarios más vinculados a Málaga Acoge.
La vivienda es una donación de la familia de Francisco Salcedo y se integrará en la red de centros y servicios de la Agrupación de Personas Sin Hogar de Málaga, de la que Málaga Acoge forma parte, lo que vendrá a reforzar los recursos destinados a estos jóvenes en la capital.
Este proyecto consiste en reformar y adecuar una vivienda de dos plantas y más de 100 metros cuadrados y está llevando más tiempo del inicialmente previsto. "Aunque ya estamos en la fase final de los trabajos, necesitamos un poco más de aliento, 6.000 euros, para que esta casa tan necesaria sea ya una realidad", indican.
Por ello, han lanzado un reto para lograr esos 6.000 euros. Por ahora superan los 2.500 euros y solicitan la colaboración para impulsar esta vivienda en https://www.migranodearena.org/reto/21005/pon-un-ladrillo-qu....
En lo que va de año se ha atendido a 141 jóvenes, chavales como Outhman Beda, que comenzó este curso sus estudios de Educación Social en la Universidad de Jaén tras superar el bachiller y la Selectividad en Málaga; Bilal, que vive en uno de los tres pisos de acogida y es ayudante de cocinero en el restaurante La Tierra de Torremolinos; Toufik o Hamsa, empleados en Tejeringos y Matahambre, respectivamente.
Desde Málaga Acoge solicitan el apoyo de la sociedad malagueña para "poner un ladrillo para continuar acompañando a los jóvenes en movimiento en su camino hacia adelante, construyendo su futuro junto a ellos".
