La ministra en funciones de Defensa, Margarita Robles ha mostrado su solidaridad con las reclamaciones de las trabajadoras de Dulcinea Nutrición, la empresa concesionaria del servicio de comidas en los cuarteles militares del Campo de Gibraltar, que llevan dos meses sin cobrar sus salarios.
La plantilla está sufriendo además “otras prácticas abusivas y humillantes por parte de la empresa, tanto en prevención de riesgos y de salud como en cuestiones básicas como la entrega de las nóminas y el contrato, que siguen sin recibir”, denuncia CGT.
La plantilla presta servicio en cinco cuarteles del Campo de Gibraltar: Campamento (San Roque), el de Camarinal-Bujeo (Tarifa), y los de Charco Redondo (Los Barrios) y Adalides (Algeciras).
La propia Margarita Robles se puso en contacto telefónico este lunes con la delegada de CGT en Dulcinea, María Dolores Rodríguez, para mostrar su apoyo a las demandas laborales de las empleadas de dicha empresa adjudicataria del Ministerio de Defensa.
Robles se interesó por conocer de primera mano la situación de las trabajadoras y respaldó la causa que defienden. La máxima responsable ministerial de Defensa preguntó por la situación actual y prometió estar en contacto.
De hecho, ayer martes, Robles volvió a llamar a la delegada sindical. Se volvió a interesar por la situación de las trabajadoras y se comprometió a “hacer lo posible, dentro del actual contexto de Gobierno provisional, ante la reciente convocatoria de nuevas elecciones generales”.
No obstante, la responsable política afirmó que “hará todo lo que esté en su mano para ayudar a resolver la delicada coyuntura que afrontan las empleadas de Dulcinea”.
Por su parte, la delegada de CGT ha mostrado su “agradecimiento por el gesto de la responsable de esta cartera en estos momentos tan complicados que atraviesa la plantilla, que se encamina ya al tercer mes consecutivo sin recibir sus correspondientes salarios”.
En este sentido, María Dolores Rodríguez ha manifestado que “todo esto se está haciendo aún más cuesta arriba, ya que los retrasos en el pago siguen haciendo mella en cada casa. Nos sentimos indignadas y exigimos a la empresa que cumpla con su deber a la mayor brevedad”.
“Por ello, agradecemos a la ministra de Defensa su interés sincero, su trato cordial y la rápida respuesta tras la huelga que hicimos el pasado viernes. Le hicimos un llamamiento directo ese día para que se solidarizara con nosotras como mujeres que estamos padeciendo un trato abusivo por parte de Dulcinea”, añadió la representante.
Margarita Robles detalló precisamente que había visto un vídeo de dicha protesta en la que las trabajadoras le interpelaban directamente con carteles con su nombre y una fotografía suya y le rogaban su intervención ante los abusos de la concesionaria de los cuarteles del Campo de Gibraltar. “Margarita, no nos dejes sola” era el mensaje de la pancarta principal de la concentración.
CGT ya había remitido previamente una carta a la ministra alertando de las infracciones de la empresa no solo en el deber de los abonos mensuales de la nómina, sino también en otros ámbitos laborales.
Visita de Inspección
De hecho, Dulcinea acumula quejas y denuncias de CGT ante la Inspección de Trabajo por muy diversos motivos: “Falta de material adecuado, bajas sin cubrir, transporte de comida en furgonetas sin equipamiento para el adecuado mantenimiento del frío, ausencia de control horario, falta de entrega del contrato y nóminas…”.
“Precisamente ayer una inspectora de esta entidad se personó en uno de los centros de trabajo para analizar las condiciones laborales y estuvo recabando diversa información, aunque continúa sin recibir la documentación solicitada a la empresa”, añade el sindicato.
Ante esta persistente falta de respuesta de Dulcinea a sus requerimientos, Inspección ha comunicado que acudirá a la sede de la empresa en Cádiz y seguirá insistiendo en obtener la información pertinente por parte de la concesionaria.
CGT hace un nuevo llamamiento a la empresa para que “de una vez por todas y a la mayor brevedad cumpla con su deber y efectúe el abono de los salarios pendientes, además de respetar la normativa laboral vigente y a las propias trabajadoras”.