Añadió el Ejecutivo del Peñón que había tomado una muestra del combustible derramado por el Zein 1, por lo que invitó a las autoridades españolas a someter a alguna muestra de las encontradas en la costa española a una prueba en un laboratorio para comprobar si su procedencia era del citado barco.
No obstante, confirmó que en las operaciones de bunkering realizadas por el citado barco, se derramó “una pequeña cantidad del combustible”, que cifró en “no más de 400 litros”. Según el Gobierno de Gibraltar, “el despliegue rápido y eficaz del plan de respuesta” establecido para tales incidentes, permitió que la “pequeña cantidad” de aceite fuera contenida cerca del barco, siendo entonces recogido, por lo que fue “inofensivo”.
Además, el Ejecutivo del Peñón recordó que cuando el incidente provocado por el New Flame “España culpó de la contaminación de petróleo que alcanzó la línea española a este buque”, mientras que, según el Gobierno gibraltareño, cuando comprobaron el aceite en un laboratorio español se descubrió que “en absoluto” ese aceite venía en su totalidad del New Flame, sino “de algún otro barco que pasa por el Estrecho”. Incidentes como este, concluyó, deberían servir para alertar a la opinión pública sobre aquellos que siempre señalan a Gibraltar sin justificación.
Factura por limpieza
Por su parte el alcalde linense contestó ayer a las palabras del político gibraltareño Joseph García por el asunto de la contaminación ocurrida el domingo 20 de septiembre y que procedía de Gibraltar.
“Este señor argumenta que como el PP dice que las aguas son españolas que no remitamos entonces a Gibraltar la factura por los gastos de limpieza de la playa afectada por la contaminación. El argumento es tan inconsistente que, atendiendo a su requerimiento, bien valdría no enviar la factura, pero exigimos entonces que todos los beneficios generados por la actividad marítima en aguas cercanas a Gibraltar sean entregados a los españoles. A veces se está más guapo guardando silencio”, recomienda a Garcia.