El sector servicios español continuó expandiéndose a un ritmo sólido en febrero, y el crecimiento estuvo apoyado por otro aumento importante de los niveles de los nuevos pedidos recibidos, según el índice PMI de IHS Markit.
Las empresas optaron por seguir contratando personal para atender las mayores cargas de trabajo, mientras que la confianza en el futuro sigue siendo positiva.
No obstante, los costes operativos aumentaron a la tasa más alta en más de diez años, debido en gran medida al aumento de los salarios, que en parte reflejan el reciente ajuste del salario mínimo interprofesional (SMI). Las tarifas también aumentaron, aunque a un ritmo mucho más lento que el de los costes.
El Índice de Actividad Comercial se mantuvo practicamente igual en febrero, con un nivel de 54,5, frente al 54,7 observado en enero.
Se ha registrado una expansión ininterrumpida del sector servicios desde noviembre de 2013, y la última alza se mantuvo de nuevo por encima del promedio histórico del estudio. El fuerte aumento de los nuevos pedidos apoyó la última expansión.
Las empresas encuestadas informaron que la demanda del mercado se ha fortalecido y que tuvieron éxito a la hora de captar nuevos clientes. No obstante, los últimos datos apuntan al mercado interno como la principal fuente de crecimiento.
A pesar de haber puesto fin a un periodo de seis meses de contracción, los nuevos pedidos procedentes de clientes del extranjero solo aumentaron marginalmente en febrero.
Paul Smith, director económico de IHS Markit ha destacado que el crecimiento de la economía española se mantuvo en buena tónica en febrero, y los datos del índice PMI sugieren que la economía está en camino de registrar una expansión razonable del PIB en el primer trimestre del año.
"No obstante, las tendencias divergentes entre el sector manufacturero y el sector servicios son evidentes, ya que el sector manufacturero registró un resultado débil en febrero comparado con una sólida expansión continua en el sector servicios. Esto parece reflejar que ambos sectores se encuentran relativamente expuestos a la debilidad de la demanda internacional, aunque las empresas de servicios generalmente se muestran más protegidas que sus homólogas manufactureras", ha explicado.
Smith subraya que las empresas del sector servicios se enfrentaron a sus propios desafíos: "Un fuerte aumento de los costes laborales debido al reciente aumento del salario mínimo interprofesional derivó en el mayor aumento de los costes operativos en más de una década y a una notable reducción de los márgenes de beneficios".