Eso sí, los representantes elegidos bajo las siglas de CC OO requirieron “garantías legales para los 94 trabajadores que quedan en plantilla”. Desde el comité se solicitan cartas de garantías personales “ya que el convenio que tenemos firmado, en su artículo 21, recoge el mantenimiento de la plantilla con un censo de 126 trabajadores, no habiendo sido esta cláusula impedimento para ejecutar despidos”.
A este respecto, el presidente del comité, Jorge Cañada, aseguró que “el presidente de La Seda afirmó recientemente que la plantilla estaba dimensionada. Por ello no debería ser un problema firmar estas cartas de garantías si la intención de la empresa es la de no despedir a nadie más”. Unas garantías que “serían negociables y que no supondrían coste alguno a La Seda si de verdad no recorta más plantilla”.
Sin embargo, Cañada mantiene que “no quieren llegar a acuerdos porque pretenden despedir a más gente. La empresa ya se levantó en marzo de la mesa de negociación y todavía estamos esperando que vuelva”.
El comité de empresa indicó que estas propuestas “se han enviado a la empresa y a la Junta de Andalucía. A la compañía hemos tenido que mandar el escrito mediante burofax porque nadie quería firmar el recibí”.
Cañada indicó que “al presidente de La Seda se le dio este escrito con la propuesta en su reciente visita a la comarca. Llevamos a un abogado para firmar el acuerdo pero se negaron”.
Desde le comité se subraya que “quieren cinco cabezas de turco cuando se han atendido a sus peticiones. Tienen un actitud de acoso y derribo, ya denunciada, pero no vamos a firmar un convenio sin garantías y dejando a la plantilla desprotegida. No nos vamos a tirar por el tajo de Ronda”.
En cuanto a las relaciones del comité con el sindicato Comisiones Obreras, se asegura que “no tendríamos inconvenientes en retomarlas si eso sirviera para alcanzar un acuerdo”.
Eso sí, Cañada advirtió a la secretaria provincial de Fiteqa, Sandra Cantero, que “el sindicato no es ella, son los trabajadores. Ya alcanzó un acuerdo fuera de la ley que supuso el despido de 20 trabajadores, de lo cual es responsable. Pedimos que no interfiera y que no se posicione en contra de un comité de empresa, una situación que no se había dado antes y que nos ha obligado a contratar a un abogado. Si no ayuda que se mantenga al margen porque ya ha hecho mucho daño”.
Readmisión trabajadores
Otra de las propuestas del comité es el reingreso de los 20 trabajadores despedidos a través de un ERE aprobado por la Junta. Según Cañada, “los despidos fueron por motivos personales y no laborales y todos los trabajadores tenían relación con CC OO. Existe un recurso contencioso administrativo que se retiraría si se alcanza un acuerdo global” con Artenius.
Según el comité, “la intención es que la reincorporación se dé sin que haya un aumento de la masa salarial. Proponemos la reducción inicial de la jornada laboral al 80%, para poder facilitar la salida voluntaria de 20 trabajadores, sin coste alguno añadido para la empresa y así restituir el número de 94 trabajadores. Además, con la reducción la empresa tendría a más trabajadores por el mismo coste”.
Finalmente, Cañada afirmó que “hemos solicitado la masa salarial del personal fuera de convenio porque en los últimos años su sueldo ha aumentado en un 15%”.
Incidentes
Las declaraciones del comité de empresa se efectuaron en una rueda de prensa ofrecida ayer en el antiguo cuartel Diego Salinas de San Roque, en la que la polémica y la tensión que se vive en la empresa volvieron a hacer acto de presencia. Así, hasta cuatro agentes de la Policía Local tuvieron que acudir a la convocatoria ante la negativa de los integrantes del comité, elegidos bajo las siglas de CC OO, de llevar a cabo la comparecencia por la presencia de trabajadores de la compañía que querían asistir como público.
Desde el comité se avanzó que estos trabajadores querían “reventar” y “sabotear” la convocatoria, por lo que se optó por avisar a la Policía Local para que la rueda de prensa pudiera celebrarse.
Si bien la crispación no se tradujo en incidentes mayores, sí que se produjeron duros cruces de declaraciones sobre los intereses de cada parte en este conflicto.
Así, mientras algún trabajador denunció que “nos tenemos que enterar por la prensa de lo que pasa”, desde el comité se apuntó que su presencia estaba orquestada para cubrir los intereses de la compañía.
La presencia de los agentes de la Policía Local propició que el último de los empleados que se negaba a dejar la sala que acogía la rueda de prensa accediera a abandonarla tras el requerimiento policial.
Disensiones
El grupo de trabajadores disconformes con la postura del comité de empresa dejó entrever que acudirán a todos los actos que el citado comité convoque.
Uno de estos trabajadores, quien se identificó como Javier Valle, quiso dirigirse a los medios para expresar su postura. Valle declaró que “llevamos arrastrando esta situación desde hace tres años. Los cinco representantes de CC OO en el comité contaban con un respaldo inicial que han ido perdiendo, ya que muchos empleados se han descolgado ya de sus planteamientos”.
Para este trabajador, “lo básico es conservar el empleo. Sin embargo, la actitud del comité es de intransigencia sobre posibles pérdidas de puestos de trabajo. Hoy en día debemos acatar algunas decisiones aunque no gusten, incluidos posibles despidos. No cabe eso de decir o todos o ninguno. Desgraciadamente, el poder lo tiene la empresa”.
Valle señala que “en el enfrentamiento directo con la empresa siempre perdemos los trabajadores. La posición del comité nos está llevando al cierre y debemos salvar los trastos”.