El alcalde de Chiclana, José María Román, ha recibido a los alumnos y profesores procedentes de Alemania, del instituto Anna Warburg Schule de Hamburgo, acto en el que también han estado presentes el delegado municipal de Educación, Joaquín Páez, así como estudiantes y profesorado del IES Huerta del Rosario. José María Román ha dado la bienvenida a todos a la ciudad, señalando que “estos intercambios ayudan a construir una Europa de los pueblos y de las personas, por encima de las nacionalidades”.
“Son estas iniciativas las que ayudan a que las fronteras estén cada vez más diluidas”, ha destacado el alcalde, que también ha incidido en que “estos proyectos pueden sacarse adelante gracias al profesorado y a las familias, que ponen todo de su parte, para que sus hijos puedan disfrutar de esta experiencia”.
Por su parte, el vicedirector del IES Huerta del Rosario, Antonio Butrón, ha explicado que ya en abril el alumnado local tuvo la oportunidad de disfrutar del viaje a Alemania, mientras que ahora los 15 estudiantes alemanes han disfrutado de la feria, siguen disfrutando de la playa “y ahora comenzarán a conocer el resto de la ciudad, así como otras localidades vecinas, yendo, incluso, hasta Sevilla”. Además, confía en poder continuar con esta iniciativa en convocatorias próximas, dado lo que supone para los alumnos.
Además, la profesora de Hamburgo, Mascha Kuhl, ha incidido en la importancia de estos intercambios, porque ayuda a unir países y culturas, al mismo tiempo que crea amistades. “Estos intercambios son mucho más que el viaje de unos estudiantes, porque podrían llegar a ser el puente entre dos ciudades”, ha señalado, destacando también que están teniendo una estancia muy grata en Chiclana.
Cabe destacar que este programa lleva por nombre ‘El arte de convivir’, para el que fue seleccionado el IES Huerta del Rosario, siendo subvencionado por la Junta de Andalucía. De esta forma, 15 alumnos chiclaneros han tenido la oportunidad de visitar ya Alemania y ahora les toca recibir a los estudiantes que los acogieron en sus casas durante el mes de abril. Además, hay que reseñar que es una experiencia en la que tanto los jóvenes participantes como sus familias se muestran plenamente satisfechos, asegurando que el vínculo creado entre las familias y los escolares alemanes y españoles es muy positivo.
