Cuando hace 16 años el realizador de cine Ángel Gómez Hernández hacía sus primeros pinitos dirigiendo cine en casa -eso sí, asesorado y apoyado por un reconocido escritor de género fantástico y cinéfilo de pro como su padre, Ángel Gómez Rivero, y con un clásico del cine español como el añorado Paul Naschy como generoso colaborador- no podía imaginar que, rozando la treintena, se vería sentado con grandes productoras de Hollywood negociando sus futuros proyectos.
Es un sueño hecho realidad que este especial con recién estrenada proyección internacional nos cuenta en INFORMACIÓN. “La ciudad es maravillosa. Es una situación increíble. No soy especialmente místico para dejarme llevar por lo sensorial, pero fue poner un pie en Los Ángeles y decir…¡Ostras!. Ha ido todo rodado, me he sentido protagonista de esta historia, con gente que se quiere reunir contigo.
Un encontronazo maravilloso; como un amor de verano”. Con estas palabras resume Gómez Hernández su experiencia de 21 días en la meca del cine. Han sido tres semanas de vertiginosa agenda, con 22 reuniones acordadas con otras tantas productoras: productores ejecutivos, guionistas…”Me siento orgulloso y afortunado a partes iguales, por vivir lo que siempre soñé”, comenta.
Lejos de lo que suele contarse de los tiburones de Hollywood y de la dureza habitual de las negociaciones con los grandes ejecutivos de la industria, Ángel Gómez asegura haberse sentido “bastante cómodo”.
Habla de estos peces gordos como gente “abierta, muy cercana y muy cálida, como suelen ser los estadounidenses, te hacen sentirte bien, incluso teniendo en cuenta que, aunque manejo el inglés, me enfrentaba a una situación bastante complicada: tenía que defender mi proyecto de largometraje, y a mí mismo”. Unas reuniones que, asegura, han sido muy productivas.
Todo arrancó en agosto, cuando sus actuales mánagers le escribieron tras ver su último y laureado cortometraje Behind, que acumula ya más de medio centenar de premios internacionales y más de 520 proyecciones en festivales, y que en internet supera ya las 38.000 reproducciones. Ya entonces viajó a Estados Unidos para firmar con su mánager y dos agencias de representación, de las más importantes de la industria, que representan a gente como Antonio Banderas, Adrien Brody, la cantante Sia o JK Simmons. “Al poco tuve que rechazar a tres agencias más que me escribieron, pero estoy muy contento con mi elección”, asegura. Su actual manager, Scott Glassgold, que es también productor, acaba de llevar al festival South by Southwest, de Austin, la cinta de ciencia-ficción Prospect, que partía precisamente de la idea de un corto de un director joven, como Ángel.
Tras firmar, le aconsejaron volver en febrero y mantener reuniones con las productoras. Han sido, reitera, 21 días con 22 reuniones, con ejecutivos de Metro Goldwyn Mayer, Paramount, Fox, Sony, Warner Bros, Columbia Pictures, Blumhouse, DarkCastle, Atomic Monsters (Productora de James Wan), Hasbro Studios, Silver Pictures, GhostHouse (Sam Raimi), Monkeypaw, Campfire, Screen Gems, Di Bonaventura o Tabularasa films, entre otras. Había dos vertientes. Estaban, por un lado, los interesados en convertir Behind en un exitoso largometraje; y también los que pretendían que Ángel aceptase rodar guiones ya escritos. “Me he vuelto con siete u ocho propuestas.
Ahora tengo que evaluar si es lo que quiero hacer o no. Adentrarme en lo que es hacer cine de encargo con un guión cerrado o si me apetece luchar por sacar mi proyecto”, confiesa. Para esto último, una guionista de allí, cuyo nombre no puede revelar, pero que es muy reconocida, se encuentra trabajando en el libreto de la adaptación a largometraje de su historia. “Puedo decirte, al menos, que ha escrito bastantes trabajos como guionista para Netflix o Universal”, nos avanza. Pero no todo ha sido trabajo y estrés por las reuniones. Los fines de semana, Ángel ha podido aprovechar para ver Las Vegas, Malibú, Venice Beach, el parque de Universal e incluso ha visto un partido de baloncesto de los Lakers en el Staples Center. Además, coincidió su estancia allí con los Oscar, que vio desde la casa de Zendaya. “Una experiencia muy divertida”, nos comenta. También coincidió allí con otro talentoso director algecireño, Alexis Morante, y de ese encuentro dejó constancia en Facebook.
Volverá en enero, margen que le han dado para rodar su próximo proyecto, el largometraje Voces, con guión de Víctor Galán. Mientras, comenzó el pasado fin de semana el rodaje de Cariño, también con guión de Galán, y en el que vuelve a colaborar con la actriz de La que se avecina Macarena Gómez. Lo de Ángel Gómez promete. Esperamos verle a menudo cruzar el charco y, quien sabe, tal vez vivir los Oscar en el mismísimo Teatro Kodak.
