La consejera colocó hoy la primera piedra de las obras de construcción de la red de abastecimiento y saneamiento del Pago de la Rana Verde, una actuación que marca el punto de partida hacia la legalización de las viviendas construidas fuera de ordenación. Y es que la ejecución de este proyecto permitirá que la zona de El Cotín cuente con conexión a la red de agua potable, servicio básico del que hasta ahora carecía.
Esta actuación, que tiene un plazo de ejecución de 20 meses y que supondrá la creación de 243 puestos de trabajo entre directos e indirectos, beneficiará a unas 20.000 personas, a las que se le garantizará el abastecimiento de agua potable.
Las obras consisten en la ejecución de una red de tuberías de abastecimiento, con una longitud de 16,5 kilómetros, que se instalará bajo los viales y caminos del núcleo urbano y que estará conectada con el depósito de regulación de Santa Ana, que será la fuente de suministro de agua.
El proyecto se completa con la construcción de una red de saneamiento que se instalará a través de las calles que prevé el plan urbanístico de la zona. Esta red tiene la particularidad de separar las aguas fecales y el agua de lluvia, para favorecer el tratamiento de los residuos que llegarán hasta la estación depuradora de aguas residuales (EDAR) de La Barrosa.
La red de saneamiento de aguas residuales tendrá tres colectores que recogerán todos los vertidos de la zona a través de 17 ramales correspondientes a las calles que articulan la zona. El colector principal, que discurrirá por la carretera de Las Lagunas, desembocará en la estación de bombeo que llevará los residuos hasta la EDAR de La Barrosa. Por otro lado, la red recogerá el agua pluvial a través de ramales distribuidos por las calles según el plan urbanístico de la zona.
La actuación, en la que se invertirá 15 millones de euros, se engloba dentro del convenio de colaboración entre la Consejería de Medio Ambiente y el Ayuntamiento de Chiclana para la mejora de la gestión de los servicios públicos del ciclo integral urbano del agua y la financiación de las infraestructuras en su ámbito territorial, que comprende la zona norte del municipio, el Pago del Humo y la Rana Verde. El convenio prevé una inversión global superior a los 47 millones de euros para distintas actuaciones de construcción de infraestructuras de abastecimiento (16,6 millones) y saneamiento y depuración (20,9 millones). Además, también incluye la construcción de diversas infraestructuras que serán financiadas por el canon de mejora municipal (6,8 millones).
El alcalde chiclanero, José María Román, explicó que esta obra supone “el punto de partida para mejorar la calidad de vida de muchos ciudadanos”. Se trata, dijo, de “una obra pionera en el proceso de regularización y legalización” de las más de 15.000 viviendas ilegales que hay contabilizadas en el municipio. Y por ello, pidió paciencia a los vecinos de la zona. “Trabajar en ese suelo no es fácil y solicito la colaboración de todos, especialmente de los vecinos que tendrán que sufrir las obras pero que más adelante se alegrarán”.
Pero éste no será el único avance que se lleve a cabo este mes en el proceso de legalización de viviendas. El regidor chiclanero anunció ayer que este mes se elevarán a Pleno para su aprobación las ordenanzas para la regularización de las Áreas de Gestión Básica, el marco jurídico que permitirá dotar de servicios más de 18 millones de metros cuadrados de suelo urbano no consolidado. Estas ordenanzas incoporan el faseado de las obras de urbanización y mayores facilidades de pago para los propietarios de las viviendas, dos aspectos que no contemplaban las ordenanzas que el cuatripartito intentó aprobar sin éxito durante su mandato.
Tras su aprobación, el documento deberá pasar por un periodo de exposición pública y alegaciones antes de entrar en vigor definitivamente.